Elena Klymenko, una mujer ucraniana de 38 años, huyó de su país el mismo día que inició la invasión de Rusia, se dirigió a Varsovia (Polonia) y está viviendo malos momentos debido a que, como consecuencia de la guerra, dos de sus sobrinos han fallecido.
“Esto es un genocidio, los soldados rusos mataron a mis dos sobrinos. Tenían 3 y 15 años, por favor, que Europa detenga esta masacre”, comentó la mujer en una entrevista con La Nación de Argentina.
Klymenko escapó de Ucrania una vez empezó la guerra y llegó a Moldavia, allí su expareja pudo acogerla. Ella se encontraba tranquila, sin embargo, estos últimos días se enteró de la muerte de sus sobrinos.
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Ella contó que su prima Natasha y su esposo querían huir de la ciudad de Bucha, al norte de Kiev, junto a sus tres hijos: André, de 15 años; Mihail, de 13; y Nicola, de 3.
“Eran cinco en el auto y los rusos empezaron a disparar con ametralladora. Solo uno de los chicos, Mihail, sobrevivió. Mi prima y su marido se encuentran heridos ahora en el hospital”, dijo.
Acerca del otro niño de 13 años, se supo que está con gente que no conoce. “Me desmayé cuando mi mamá me llamó para contarme. Creo que fueron los primeros chicos que mataron”, agregó.
“Psicológicamente no logro creer que todo esto que está pasando sea cierto. ¡Es un genocidio!, algo nunca visto... Por eso le pido ayuda a toda Europa para detener esta guerra, porque ya hemos pagado demasiado”, señaló.