Pablo Emilio Escobar Gaviria fue un reconocido narcotraficante, terrorista y político colombiano, quien hizo fortuna a través del tráfico de cocaína hacia Estados Unidos. Debido a esto se convirtió en uno de los hombres más adinerados de todo el mundo.
A pesar de que ya pasaron casi 30 años de su muerte, aún continúan saliendo a la luz historias sobre lo que en vida hizo. Una de ellas es que una vez el fundador del Cártel de Medellín quiso secuestrar a uno de los artistas más grandes de la historia musical, Michael Jackson.
El Rey del Pop se encontraba en su mejor momento en los años 90, por lo que su círculo social estaba conformado por celebridades y personas famosas a nivel mundial. Incluso, llegó a entrar a la Casa Blanca para reunirse con el entonces presidente de Estados Unidos, George H.W. Bush.
Este nivel de popularidad hizo que Pablo Escobar quisiera llevarlo a la Hacienda Nápoles en uno de sus aviones privados para que realice un concierto para él y toda su familia, quienes admiraban al artista.
Pero, en realidad, el plan del narcotraficante no solo era el espectáculo, sino que también planeaba secuestrar a Michael Jackson cuando la presentación acabara y pedir un rescate de 60 millones de dólares.
Esta historia la confirmó Juan Pablo Escobar, hijo de quien fue el colombiano más poderoso, en una entrevista que le hizo TN Argentina, un medio de comunicación argentino, cuando publicitaba su libro “Pablo Escobar in Fraganti”.
“Parecía todo muy normal porque teníamos la pista privada de aterrizaje ahí, la cancha de fútbol muy cerca para que él armara su concierto, y yo veía como fácil la logística para que él llegue y haga su concierto y se regrese a su país, pero a mi padre se le ocurre de manera inmediata, automática, que él lo invitaría a quedarse y que la salida de la hacienda Nápoles le costaría 60 millones de dólares”, reveló el hijo del narcotraficante ante las cámaras.
Pablo Escobar ya había usado su hacienda en anteriores ocasiones para realizar shows privados con diversos artistas reconocidos. La hacienda tiene una extensión territorial de más de 3.000 hectáreas.
Su hijo Juan Pablo quiso ir más lejos y le pidió a su padre traer a Michael, quien era su ídolo musical.
“Esto surge a partir de que yo, cansado de ver a los mismos artistas en la Hacienda Nápoles, le digo que por qué no traíamos a alguien de talla internacional y él me acepta. Yo le sugiero a Michael Jackson como posible personaje, porque yo era fanático y a mi padre también le gustaba. Le pareció buena la idea”, declaró Juan Pablo.
El pedido de su hijo lo hizo idear el macabro plan para que el artista no se fuera apenas concluya el concierto, sino que cobraría por su libertad.
“No se sabía el costo de un concierto privado, pero después con su mente maquiavélica inclinada hacia el mal, pues me decía ‘sí, yo lo voy a invitar’ (…) quería traerlo, pagarle para que cante, y después, que él le pague para dejarlo salir de donde él había llegado a cantar”, añadió.
El rapto del Rey del Pop no se concretó debido a que la Hacienda Nápoles fue expropiada ese mismo año por parte del Estado colombiano después de una batalla judicial.
Poco después, Pablo Escobar fue capturado por la Policía de Colombia en Medellín cuando intentaba escapar.