El ministro de Sanidad alemán en funciones, Jens Spahn, afirmó hoy ante el aumento de contagios y de la presión hospitalaria en Alemania que el país enfrenta actualmente una ‘pandemia de los no vacunados’, de la que dijo que es “masiva”.
Agregó que aunque este mes expira la llamada situación epidémica de alcance nacional, que permite al gobierno federal y de los estados federados establecer medidas sin la aprobación de los parlamentos, “la pandemia sigue aquí y la cuarta ola, con toda su fuerza”.
En una rueda de prensa para analizar la situación en el país, el presidente del Instituto Robert Koch (RKI) de virología, Lothar Wieler, señaló por su parte que el impacto de la cuarta ola es el que se temía, por el hecho de que la tasa de vacunación sigue siendo insuficiente.
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Hasta el martes, el 69,5% de la población de Alemania había sido vacunada, y el 66,8% con la pauta completa.
Precisó que 16,2 millones de ciudadanos mayores de 12 años todavía no están vacunados, 3,2 millones de ellos mayores de 60 años.
El ministro de Sanidad lamentó, además, que el ritmo de vacunación de la dosis de refuerzo sea insuficiente, con solo dos millones de inoculados de los 30 millones considerados de riesgo.
Spahn volvió a defender la oferta generalizada de la dosis de refuerzo, más allá de la recomendación de la Comisión Permanente de Vacunación (Stiko) de aplicarla únicamente en determinados grupos de riesgo.
Las autoridades sanitarias verificaron 20.398 nuevos contagios en 24 horas y 194 muertos por o con COVID-19, mientras que la incidencia acumulada en siete días se sitúa en 146,6 nuevas infecciones por cada 100.000 habitantes.
La tasa acumulada de ingresos a nosocomios en siete días es de 3,29 por cada 100.000 habitantes y la ocupación con pacientes con coronavirus e camas disponibles en las UCI es del 9,4%.