Brasil registró 4.195 muertes asociadas al coronavirus en las últimas 24 horas, nuevo máximo diario, y acumula 336.947 fallecidos desde el inicio de la pandemia hace poco más de un año, según informaron fuentes oficiales este martes 6 de abril.
El Ministerio de Salud reportó 86.979 nuevos contagios, con lo que el balance total de infectados se elevó hasta los 13 100 580, en momentos en que el país afronta la peor fase de la crisis sanitaria, con el sistema público de salud al borde del colapso.
Brasil es el segundo país con más fallecidos y casos confirmados de la enfermedad, tan solo por detrás de Estados Unidos, aunque actualmente es el lugar del planeta donde más se muere por COVID-19, con un promedio en la última semana que supera los 2.500 decesos diarios.
El anterior máximo diario de decesos por el coronavirus en la nación ocurrió el 31 de marzo, cuando alcanzó 3.869.
Los datos confirman un agravamiento de la pandemia en el gigante sudamericano de 212 millones de habitantes, donde la campaña de vacunación, que empezó el 17 de enero, sigue a un ritmo lento, pues apenas ha recibido la primera dosis un 9% de la población.
Sao Paulo, el estado más rico y desarrollado de Brasil, con una población de 46 millones, similar a la de países enteros como Argentina o España, volvió a registrar este martes un nuevo récord diario de fallecimientos al llegar a los 1.389 en las últimas 24 horas.
Casi el 90% de las unidades de cuidados intensivos de la región paulista están ocupadas y en la capital homónima, ante el crecimiento de los decesos, las autoridades locales se han visto obligadas a autorizar entierros nocturnos y contratar autobuses escolares para el traslado de los cadáveres.
La misma situación se vive prácticamente en los otros 26 estados del territorio brasileño, donde la red pública de hospitales está al límite de su capacidad y además lidia con la falta de medicamentos esenciales para la intubación de los pacientes más graves.
Además, preocupa la circulación de variantes del SARS-CoV-2 consideradas más infecciosas, como la que surgió en el estado de Amazonas (norte), conocida como P.1 y ya predominante en varias entidades federativas de Brasil, como Río de Janeiro y Sao Paulo.
De esta nueva variante, que según el Ministerio de Salud es “hasta tres veces” más contagiosa, se han detectado casos en 21 de los 27 estados brasileños, y de la variante británica en 13 de ellos, según datos de la Fundación Oswaldo Cruz (Fiocruz), centro de investigación médica referencia en Latinoamérica.