Venezuela permanece en crisis sistemática bajo el mando de Nicolás Maduro, quien lleva casi 10 años en el poder. Desconocido por parte de la comunidad internacional, el heredero de Hugo Chávez ha reflotado con el descrédito del líder opositor Juan Guaidó.
Ahora que países como República Dominicana o Panamá le retiraron su apoyo y que la Unión Europea (UE) ya no lo reconoce como presidente encargado ni como jefe del Parlamento venezolano, Guaidó apostó por el enésimo llamado a la unión opositora.
“Lograr construir la mayor y mejor unidad posible y la suficiente presión interna con nuestros aliados para ir a elecciones libres y resolver la emergencia que creó esta dictadura”, es el objetivo esbozado por el líder opositor el miércoles 3 de marzo.
En una conferencia de prensa a la que tuvo acceso La República de forma virtual, enfatizó que junto a “nuestros aliados internacionales estamos en una coalición multilateral para lograr un acuerdo para unas elecciones presidenciales y parlamentarias libres y justas, y así aproximar la solución a esta crisis”.
“Se ha hecho común el llamado a la unión y el llamado a replantearse las formas de actuar políticamente en la oposición”, afirmó el sociólogo y doctor en Ciencia Política venezolano, Amalio Belmonte.
Desde el acomodado municipio Chacao, Guaidó se dirigió a los medios acompañado por varios militantes reconocidos en su lucha contra Maduro e integrantes de la sociedad civil. No obstante, analistas han opinado que mantiene los mismos apoyos, mas no suma nuevos.
Ni el dos veces candidato presidencial, Henrique Capriles Radonski, ni la lideresa ultraderechista María Corina Machado han aceptado retomar la ruta planteada por Guaidó.
En enero de 2019 Guaido saltó a la palestra internacional cuando fue reconocido como presidente encargado de Venezuela por Estados Unidos, la UE y gran cantidad de países. Dos años después, el panorama es diametralmente opuesto.
Para Belmonte el jefe opositor es víctima de sus propios “objetivos tan profundos y tan dilemáticos”. Bajo su liderazgo gran cantidad de personas esperaban acabar con el mandato de Maduro y ahora se encuentran que está reforzado en el Palacio de Miraflores, puntualizó.
Principales sucesos desde que Juan Guaidó se autoproclamó presidente interino de Venezuela. Infografía: AFP
“Cuando uno se plantea objetivos máximos y no los consigue, comienza a perder fuerza”, subrayó el profesor venezolano a este diario. “Le hizo mucho daño haberse planteado objetivos tan profundos y tan dilemáticos”.
Opinó que esta situación se ahondó con las últimas elecciones en Venezuela, en las cuales el chavismo recuperó el control de la Asamblea Nacional (AN). Aunque varias naciones las desconocieron por considerar que carecían de fiabilidad, cambió el panorama político y legal.
Guaidó y demás integrantes de la AN electa hace cinco años, cuando se impuso la oposición en las urnas, optaron por extender su período. Sin embargo, no todos sus aliados validaron este movimiento.
A finales de enero, el alto representante para la Política Exterior de la UE, Josep Borrell, aclaró que visualizan a Guaidó como líder de la oposición venezolana, “pero no podemos reconocerle como otra cosa (por)que dificultaría el planteamiento jurídico que los Estados miembros han considerado”.
“La extensión del período electoral no tiene mucho asidero ni en la realidad ni tampoco desde el punto de vista de la legalidad (...) por mucho que hayan sido elecciones fraudulentas, que es verdad, lo cierto es que la anterior Asamblea Nacional feneció”, resaltó Belmonte.
Ante su fragmentación, el experto opinó que “a la oposición le queda unirse porque están obligados” y “debe renovar la vinculación con todos los sectores”.
En su rueda de prensa afirmó que “se ha adelantado y articulado trabajo con los aliados internacionales” tras conversar en la víspera con el secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, y el ministro de Asuntos Exteriores de Canadá, Marc Garneau.
Guaidó mantiene sus mítines e insiste en la unidad opositora. Foto: captura de Twitter
“Muchos creyeron o les hicieron creer que la Administración de los Estados Unidos no iba a reconocer al Gobierno encargado (...). La democracia, la Constitución es lo que respalda en definitiva la Administración del presidente (Joe) Biden, la Unión Europea y nuestros aliados”, dijo.
Belmonte indicó que la figura de Juan Guaidó mantiene prevalencia dentro del núcleo opositor, especialmente por su respaldo internacional, empero enfatizó que no basta con su exhorto.
“Por sí solo Guaidó no tendría en este momento la capacidad de convocar la unidad, no es un llamado que tenga resonancia universal en los sectores democráticos”, destacó el especialista. “No hay muertos políticos permanentes, pero no es el momento para que Guaidó emerja como antes”.
Entretanto, Maduro se ha consolidado como la cabeza del Estado venezolano y ha insistido que “llegará la justicia”. El jueves 4 de marzo algunos legisladores solicitaron a la actual AN citar a esposas de dirigentes opositores.
“Maduro sorteó la peor situación, hace dos años hubo acciones de calle constante. El tiempo ayuda a los que están débiles y la pandemia le ha ayudado porque no hay movilización”, apuntó Belmonte.