El presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, volvió a pronunciarse sobre la muerte de George Floyd, el afroamericano asesinado por un policía luego de asfixiarlo. Esta vez, se refirió a las protestas en casi todo el país contra la violencia policial.
Trump dijo a la prensa que el Ejército podría desplegarse en Minneapolis (Minnesota) “muy rápidamente” para detener las violentas protestas en el país.
“Podemos tener a nuestros militares allí muy rápidamente. Tienen que ser duros. Tienen que ser fuertes. Tienen que ser respetados. Debido a que esta gente, esta Antifa (activista antifacista), son muchas y malas personas de la izquierda radical”, afirmó el mandatario en referencia a los manifestantes.
“Y hay que enseñarles que no pueden hacerlo”, agregó Trump a los periodistas en la Casa Blanca antes de subir al helicóptero Marine One para partir al Centro Espacial Kennedy en el estado de Florida, donde se efectuó el lanzamiento SpaceX luego de nueve años.
Trump informó que había hablado con los familiares de Floyd.
“Hablé con miembros de la familia, gente excelente”, dijo. El presidente fue criticado por comentarios anteriores en Twitter en los que llamaba “matones” a los manifestantes y advertía que “cuando comiencen los saqueos, comenzará el tiroteo”.
En sus últimos comentarios, dijo que apoyaba las protestas pacíficas. Sin embargo, advirtió: “No podemos permitir que una situación como la que ocurrió en Minneapolis conduzca a más anarquía y a un caos sin ley”.
George Floyd falleció luego que un policía, en la ciudad de Minnesota, lo asfixiara colocando una pierna en su cuello, ya que este intentó pagar con un billete supuestamente falso de 20 dólares en una tienda.
El agente, de nombre Derek Chauvin, lo ahogó durante 10 minutos y antes de su muerte Floyd solo pudo decir: “No puedo respirar”.