En Escocia, una mujer de 34 años, identificada como Gemma Cullen, organizó una ‘fiesta’ en la aplicación Houseparty con la intención de animar a su hija, que había cumplido 13 años, debido a que no podía salir por la pandemia del coronavirus.
La mujer contactó a sus amigos y familiares para que puedan conversar y brindar, por lo que duró cinco horas. Durante ese lapso, según informó The Sun, empezaron a bailar, cantar, bebe alcohol y tocar instrumentos, cada uno desde su propia casa.
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No obstante, hubo un invitado ‘sorpresa’. Un agente policial interrumpió en uno de los hogares para ver si se estaba cumpliendo el distanciamiento social.
“Había seis en la ‘fiesta’ que estábamos organizando por video. Todos estábamos bebiendo un poco de vino y bailando. Mi amiga se había arreglado y estuvo bailando con su gato por la cocina. Ella se alejó de la cámara y luego de un rato volvió y noté que estaba hablando con alguien. Pensé en un momento que era su novio, pero era un policía que se apareció en la pantalla”, manifestó Gemma Cullen.
Incluso, la madre señaló que pensó que se trataba de un stripper. Ante la confusión, el oficial se empezó a reir y explicó a los demás, a través de la aplicación, que los vecinos habían alertado a las autoridades de que habían visto a alguien bailando, por lo que pensaron de que habían organizado una fiesta en plena expansión del coronavirus.
Efectivamente, los que estaban participando en la transmisión estaban celebrando, pero cada uno en casa.
El agente indicó que no estaban cometiendo ningún delito, por lo que se quedó hablando con ellas por diez minutos y luego se retiró.