Chile ha anunciado este lunes que entraron en la fase 4 del control de la pandemia del coronavirus, ya que los casos se duplicaron de un día para otro y llegaron a la cifra de 155. Como reacción a esta situación, se dispuso el cierre de las fonteras.
“De acuerdo a la definición de la OMS, hemos ingresado a la etapa cuatro de esta enfermedad. Es la etapa más compleja”, dijo Sebastián Piñera, presidente chileno.
Apenas dos días antes, el Gobierno había informado que ya estaba en la fase 3, que corresponde a la etapa en que las autoridades ya no pueden rastrear el origen de los nuevos contagios.
Desde que el covid-19 comenzó a expandirse por el mundo, Chile implementó la fase 1 de control para evitar que la enfermedad ingrese al país, según recomendaciones de la Organizacion Mundial de la Salud (OMS).
A pesar de ello, se reportó el primer caso de covid-19 el pasado 3 de marzo. Hasta el 7 de marzo, solo se reportaban uno o dos nuevos casos por día. En esa primera semana, las autoridades sanitarias ubicaban los contagios en ciudadanos que regresaban del extranjero y sus contactos en el territorio.
Foto: AFP.
Hasta ese punto, el control de la pandemia estaba en fase 2, en la que se rastrean los nuevos contagios para aislar a determinados grupos de personas y evitar una mayor propagación del virus.
Sin embargo, en la última semana, los reportes fueron cada vez mayores, hasta que el 14 de marzo, el Ministerio de Salud de Chile informó que habían llegado a 61 casos confirmados. Ya que no sabían de dónde provenían los nuevos contagios, anunciaron que se estaba produciendo el contagio comunitario, que corresponde a la fase 3 del control de la enfermedad.
La fase 4, en la que actualmente se encuentra el país sudamericano, se refiere a que hay una transmisión sostenida del covid-19 en todo el territorio, como lo que está ocurriendo en Italia y España.
En esta última etapa, las autoridades del país implementan todas las medidas de emergencia necesarias para mitigar los contagios y garantizar los recursos a la ciudadanía.