Este viernes, el presidente interino de Venezuela, Juan Guaidó publicó un documento en el que informó que Nicolás Maduro fue uno de los primeros mandatarios en firmar un acuerdo con Qasem Soleimani, desaparecido líder militar de Irán asesinado por militares de Estados Unidos.
El acuerdo entre Maduro y Soleimani permitía que sus Fuerzas Quds incorporaran sus bancos sancionados y las empresas en Venezuela, dice una parte del comunicado.
El Centro de Comunicación Nacional de Venezuela subrayó en la carta que el general iraní “encabezó una estructura criminal y terrorista en Irán que por años causó dolor a su pueblo y desestabilizó al Medio Oriente, al igual que Abu Mahdi al-Muhandis los hizo con Hezbollah”.
“La Presidencia legítima de Venezuela en vista de los recientes acontecimientos en el Medio Oriente reitera que el terrorismo es hoy la principal amenaza para la paz y seguridad del mundo, su influencia es tal que impacta el desarrollo integral de la sociedad, así como la plena convivencia democrática. En Venezuela vemos cómo Nicolás Maduro alberga organizaciones y grupos terroristas, que desde nuestro país atentan contra la estabilidad democrática es institucional de diversos países”, dice el comunicado.
El expresidente fallecido de Venezuela, Hugo Chavéz y el expresidente persa Mahmud Ahmadineyad tuvieron una relación muy cerca y los dos establecieron una fuerte alianza estratégica. Cabe destacar, que hay denuncias que actualmente régimen de Maduro mantiene una relación cercana con grupos terroristas como Hezbollah.
A través de la red social de Twitter, el periodista venezolano informó que funcionarios iraníes se habían reunido al sur de Venezuela: “Máxima tensión por haber presencia activa de células de Hezbollah y por posibles represalias como respuestas a muerte de Soleimani”, continúa la publicación.
Más tarde, Maduro condenó la muerte de Soleimani luego que el gobierno de Estados Unidos, dirigido por el presidente Donald Trump, lo atacara con un dron.
En un comunicado, la Cancillería expresó “su firme condena al ataque” donde resultó “asesinado” Qasem Soleimani, jefe de la fuerza Al Quds, encargada de las operaciones exteriores de los Guardianes de la Revolución iraníes.
El gobierno de Rusia, dirigido por Vladimir Putin, condenó el asesinato del general Qasem Soleimani a manos de las fuerzas de Estados Unidos, luego del anuncio de venganza del ayatolá Ali Jamenei de Irán.
“Vemos el asesinato de Soleimani después de un bombardeo en las afueras de Bagdad como un atrevido paso que conducirá a un aumento de la tensión en toda la región”, indicó la Cancillería en un comunicado.
Además, el funcionario ruso Konstantín Kosachov, indicó que ''las guerras son fáciles de empezar, pero difíciles de acabar''.
El Ministerio de Exteriores de Siria condenó el asesinato de Qasem Soleimaní y del vicepresidente chiíe de Irak, Abu Mahdi al-Muhandis, a los que calificó como ''una agresión criminal estadounidense traicionera''.
Por su parte, el presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, aseguró que la arremetida norteamericana en tierras pérsicas afectará al precio del petróleo.
Mientras que Líbano, encasilló el accionar militar de la Casa Blanca como un ''asesinato criminal''.