A Halye Anderson la asesinaron en su departamento en Binghamton, Estados Unidos. Sin embargo, su verdugo aprovechó su nacionalidad nicaragüense para intentar escapar de la justicia regresando a su país de origen.
Orlando Tercero, de 23 años, tenía un vínculo sentimental con la joven, pero confesó ante un Tribunal de Nicaragua, donde se lleva el juicio por feminicidio, que cometió el crimen por que ella no quería tener una “relación seria” con él.
Según recogió el portal The Mirror, la Justicia de Nicaragua lo declaró culpable del asesinato de la estudiante de enfermería Halye Anderson, el pasado 8 de marzo de 2018.
Se habría tratado de un estrangulamiento, según investigaron los peritos especializados que recogieron el cadáver de la joven de su departamento en la localidad de Binghamton, Estados Unidos.
Tras haber cometido el crimen, Orlando Tercero huyó hacia Nicaragua. La Justicia norteamericana quiso extraditarlo, pero el gobierno de su país se lo negó, por lo que el juicio se dio lugar allí.
Las audiencias fueron realizadas con la presencia de la familia de Halye Anderson a través de videoconferencias que fueron retransmitidas por medios de comunicación de los Estados Unidos.
El Tribunal de Nicaragua escuchó de 17 testigos que Orlando Tercero habría cometido el asesinato debido a que estaba celoso de que la joven había vuelto a tener contacto con su exnovio.
Además, se supo que el atacante intentó suicidarse, pero al no lograrlo se registró en un hospital psiquiátrico de Nicaragua alegando que sufría de espasmos de epilepsia.
Un médico del mismo centro dijo que el estado psicológico de Tercero estaba bien y que no recibía tratamiento alguno.
El joven fue declarado culpable del delito de feminicidio y se enfrenta a una pena de 30 años de prisión.