Un gran hallazgo para disminuir la contaminación ambiental. Un joven chileno de 19 años descubrió casualmente unas bacterias que comen neumáticos dentro de un macetero hecho de llantas viejas.
Jorge Miles, estudiante de medicina en la Universidad Católica de Chile, decidió armar un proyecto y presentarlo en un concurso científico en Alemania.
En una entrevista para el diario ‘Las últimas noticias’, el universitario explicó más sobre su hallazgo y proyecto. Un día cualquiera, Jorge observó unas plantas que crecían cerca de una maceta de llanta reciclada y notó que esos neumáticos estaban medio gastados. “Algo raro estaba pasando”, se preguntó.
Miles estudió el caso y descubrió que las responsables del deterioro eran unas bacterias. Los neumáticos están hechos principalmente de caucho vulcanizado, y según el universitario chileno, los microorganismos hallados se alimentan del carbono que contiene ese material.
Bacteria come neumáticos
Cuando se extrae el carbono del neumático, el caucho vulcanizado se desarma y pierda su estructura. Finalmente, en el material quedan productos simples que después son degradados por otros microorganismos.
Jorge Miles ganó el concurso científico Falling Walls Lab Chile y competirá contra otras ideas el próximo 8 de noviembre en Berlín, Alemania, donde será la final del certamen.
El estudiante aseguró que desea “romper el muro de la contaminación con neumáticos” que sigue dañando el medio ambiente. Las partículas del caucho vulcanizado perjudica la salud del planeta entre 500 a 1000 años, tiempo que le toma para desintegrarse.
Jorge Miles
Para probar la existencia de las bacterias, el joven Miles filtró la tierra de los maceteros y con este obtuvo un líquido amarillo que contenía los microorganismos.
“Puse el líquido con las bacterias en un recipiente que tenía sales minerales y caucho. Eso es someter a los gérmenes a que solo se alimenten de neumáticos”, explicó el futuro médico.
En la solución se colocó 4 gramos de pedazos de caucho, permanecieron ahí durante dos semanas, luego se observó que el peso del material disminuyó en un 2%, contó Miles.
La bacteria que Miles estudió resultó ser del género Rhodococcus, un microorganismo inofensivo, según le indicaron en el Instituto de Salud Pública de Chile.
bacteria come neumaticos