Guatemala celebrará la segunda vuelta de las elecciones presidenciales el 11 de agosto de este año. En ese marco, el domingo 28 de julio se realizó el debate entre los candidatos que aspiran a ser el próximo jefe de Estado.
Durante su intervención, el candidato del partido Vamos, Alejandro Giammattei, se refirió al enorme hacinamiento que existe en las cárceles de Guatemala. El exdirector del Sistema Penitenciario, que obtuvo el respaldo del 12, 06% de la población —por detrás de Sandra Torres, quien alcanzó el 22,08%— propuso construir 5 cárceles para la modalidad de prisión preventiva, a fin de separar a los presos sin condena de los delincuentes sentenciados.
“Tenemos que reforzar el número de prisiones. Tenemos el 300% de hacinamiento, en promedio, en todas las cárceles del país. Muchas de ellas superan eso”, aseguró el candidato presidencial en el debate de la Asociación de Gerentes de Guatemala (AGG).
El hacinamiento es considerado un “indicador no monetario” de pobreza por la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL). Usualmente se mide comparando la relación entre la cantidad de personas y el espacio disponible (cuartos, metros cuadrados). Sin embargo, no hay un consenso internacional al respecto.
Así, el Centro de Investigaciones Económicas Nacionales (CIEN) define, en su informe ‘La prisión preventiva en Guatemala’, al hacinamiento o sobrepoblación penitenciaria como “una tasa de ocupación superior al 120%”, basándose en un estudio del Comité Europeo para los problemas Criminales.
Hasta octubre del 2018, la tasa de ocupación en Guatemala alcanzó el 359%, “es decir, existe el 239% de hacinamiento”, indica textualmente el estudio de CIEN que referencia Agencia Ocote.
Tasa de ocupación en cárceles de Guatemala alcanzaba el 359% en noviembre del 2018. Fuente: CIEN
Aunque esta cifra es inferior a la citada por Alejandro Giammattei, es usual que los medios de comunicación citen la tasa de ocupación al referirse a la situación de sobrepoblación en las cárceles.
Así, el 8 de mayo de este año, EFE indicó, citando al Sistema Penitenciario, que existía un “hacinamiento de más del 300%”, ya que existían 24 982 presos cuando la capacidad era para 6800 (367 %).
Entonces, la agencia de noticias considera a la sobrepoblación carcelaria como la relación entre los presos y los espacios de los que disponen.
Por otro lado, la Dirección General del Sistema Penitenciario indicó el 26 de julio a través de su cuenta de Twitter que la cantidad de privados de libertad era de 25 178. Esa es la última estadística de la institución anterior al debate. Sin embargo, no se indica el espacio penitenciario. Si esta no se ha modificado desde marzo del 2018, la tasa de ocupación es de 370%.
La misma CIEN prefiere utilizar el término ‘tasa de ocupación’ para ejemplificar la situación carcelaria de Guatemala. En la presentación de “Avances y retos en Seguridad y Justicia 2019-2024”, de enero de este 2019, indicó que, durante el 2018 “el hacinamiento aumentó hasta alcanzar una tasa de ocupación del 352% en 2018”.
“En ese caso, el hacinamiento ya no sería 239% como era en octubre sino 232% en diciembre”, indicó el CIEN a La República.
En el 2018, la tasa de ocupación en las cárceles guatemaltecas fue de 352%. Fuente: CIEN
Podemos concluir que el dato brindado por Alejandro Giammattei es incorrecto en dos sentidos. Si nos apegamos a la definición de que es “el 120% de la tasa de ocupación”, la cifra dada por el candidato es superior a los 239%. Si entendemos al hacinamiento en las cárceles de Guatemala como la relación entre la cantidad de presos y el espacio, entonces sería inferior a las cifras de 367% (EFE) y 352% (CIEN).