En el Día del Pollo a la Brasa 2023, muchos peruanos disfrutan de este delicioso platillo que se ha convertido en uno de los más populares en el almuerzo de los fines de semana. Incluso, algunas personas suelen guardar las sobras para recalentarlas al día siguiente y de esta manera, seguir deleitándose con su agradable sabor. El único inconveniente es que su piel no es tan jugosa como otras carnes y se deben aplicar algunos trucos para que no quede tan seco. En esta nota de La República, te dejamos algunos tips para que tu pollo a la brasa se mantenga húmedo y suave.
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Cuando compramos el pollo a la brasa para compartir un ameno momento con la familia, tiene la suficiente humedad debido a la grasa que posee el ave. Sin embargo, cuando lo recalentamos, tiende a volverse más seco, ya que durante este proceso no se agrega ningún líquido para que se mantenga hidratado. Presta atención a los siguientes consejos para disfrutar este platillo:
Recalienta tu pollo a la brasa una freidora de aire
Para recalentar el pollo a la brasa en esta herramienta, coloca de tres a cuatro piezas en una bandeja y sobre papel encerado. A continuación, pon un poco de aceite en aerosol y a una temperatura de 200 °C, calienta el pollo por ocho minutos. De esta forma, tu platillo estará más jugoso y apetecible.
Recalienta tu pollo a la brasa en una sartén
Este es uno de los métodos más fáciles y prácticos de recalentar el pollo a la brasa. Solo necesitas utilizar una sartén o una cacerola con tapa. Lo primero que debes hacer es colocar un par de cucharadas de aceite y calentar hasta que dore por algunos minutos el pollo. Después de ello, agrega algún líquido como un caldo o poca agua. Finalmente, adiciona ¼ de taza por cada 200 gramos de pollo y cúbrelo, alrededor de 10 minutos, a fuego bajo.
Pollo a la brasa: recaliéntalo en un horno
Si quieres aprovechar el pollo a la brasa que guardaste del día anterior, lo primero que tienes que hacer es colocar una bandeja para horno y cubrirla con papel aluminio, sobre la que debes agregar el pollo y verter un poco de aceite sobre su carne.
A continuación, tapa con más papel aluminio y hornea el pollo a 220 °C, por ocho minutos. Recuerda que puedes agregar un par de cucharadas de agua para evitar que se reseque. Finalmente, otra opción es bañar el pollo con un poco de mantequilla, mayonesa o aceite de oliva, mezclado con hierbas, así como aplicar el aderezo que utilizaste el día anterior y verterlo cuando vayas a recalentar.
Si buscas recalentar una gran cantidad de papas fritas que sobraron de tu pollo a la brasa, puedes hacerlo en una freidora. Solo tienes que sumergirlas en aceite caliente durante unos pocos segundos. A continuación, levantas el cestillo, agitas para escurrir bien y vuelves a sumergirlas hasta que tengan la temperatura suficiente.
Para recalentar las papas fritas, puedes usar una freidora de aire. Foto: Elle
En el caso de que sean pocas papas, puedes recalentarlas en una sartén amplia con una capa de aceite en el fondo, colocándolas a fuego y esperando que esté bien caliente.
Recuerda que debes distribuir las papas en la sartén para que todas reciban la misma exposición de calor. Luego de ello, esperas un minuto y le das la vuelta, vigilando que no se quemen. Con ello, te darás cuenta de que el resultado es diferente al que se obtiene en el microondas.
Otra alternativa es recalentar las papas en un horno. Para ello, precaliéntalo entre 180 °C y 200 °C, con la bandeja dentro. En seguida, coloca las papas sin que se amontonen ni se peguen, y las dejas en el horno de cinco a 10 minutos. Finalmente, muévelas y espera otros dos minutos para retirarlas.