Agents of SHIELD 3x05: Simmons cuenta lo que vivió en el misterioso planeta | RESEÑA

En un episodio sin precedentes, la serie 'Agents of S.H.I.E.L.D.' deja de lado su trama central para darle la oportunidad a la actriz Elizabeth Henstridge de explorar a su personaje de Jemma Simmons., Con el inicio de la tercera temporada de 'Agents of S.H.I.E.L.D.', LaRepublica.pe analizará cada episodio hasta el final de la temporada. A continuación puedes leer el análisis del quinto capítulo. Título oficial del episodio: '4722 hours' ('4722 horas', en español). Fecha de emisión en Estados Unidos: 27 de octubre. Fecha de emisión en Latinoamérica: sin confirmar. Elenco principal: Clark Gregg, Ming-Na Wen, Chloe Bennet, Iain De Caestecker, Leo Fitz, Elizabeth Henstridge, Brett Dalton, Nick Blood, Adrianne Palicki, Henry Simmons, Luke Mitchell. PUEDES VER: Nuevos avances de Agents of SHIELD muestran como sobrevivió Simmons | VIDEOS Crear un programa de televisión implica un enorme riesgo. Competir en un mercado muchas veces saturado con un presupuesto y una fecha de entrega inferiores a los manejados en las grandes superproducciones cinematográficas hace que muchos escritores y productores dejen de lado las ideas nuevas y caigan en fórmulas repetitivas pero bien testeadas con las audiencias. Es decir, la vieja y mediocre excusa del "esto es lo que quiere la gente". Es por eso que llama la atención cuando un show se atreve a darnos algo más. Cuando rompe el molde. Cuando se aleja de su zona de confort. Cuando experimenta. Eso es exactamente lo que ha hecho "Agents of Shield" con su episodio "4722 horas". Lejos quedaron los días en el que la serie era otro programa más sobre espías y un "monstruo de la semana". Por una vez los escritores dejan de forzar la historia de los inhumanos y la reintegración de Hydra para crear un capítulo enfocado enteramente en un solo personaje: Jemma Simmons (Elizabeth Henstridge). La historia se desarrolla justo donde nos dejó el último episodio de la temporada: Fitz (¡al fin!) invita a Simmons a una cena romántica pero ella es absorbida por el monolito que la transporta a un planeta desconocido. Durante las primeras horas nos encontramos con la Simmons de toda la vida: optimista y amante de las reglas, sigue el protocolo de Shield y se queda en el lugar donde apareció a la espera de que sus amigos, y sobretodo Fitz, la rescaten. Pero las horas pasan y el sol no sale. Ante la falta de ayuda, Simmons se aleja del lugar a sabiendas de que solo tiene unas cuantas horas para encontrar agua o morir deshidratada. Para su suerte se encuentra con un pozo donde toma agua y se relaja. Pero de pronto es atacada por un tentáculo, confirmando que después de todo sí hay vida en este planeta. Durante todo este tiempo Simmons describe y documenta lo que sucede en su teléfono (cuya batería habría sido modificada por Fitz para durar por, literalmente, meses). Luego de cortar uno de los tentáculos de esta planta-monstruo para comérselo, Simmons escucha unos sonidos extraños y va a averiguar de donde provienen pero cae en un agujero. Cuando se despierta, se encuentra como prisionera de una persona desconocida. Fingiendo haberse enfermado, Simmons aprovecha que su captor entra en la jaula para golpearlo y huir. Durante la persecución ella se cae y golpea con una roca, hiriéndose en el muslo. Ominosamente su extraño captor le dice que "'eso' huele la sangre" y se la lleva hasta su escondite justo cuando una tormenta de arena acecha sobre ellos. A salvo, el nuevo personaje le explica la situación. Will Daniels (Dillon Casey) es un astronauta que viajó en el 2001 a través del monolito junto a tres compañeros de la NASA. Aunque los detalles de esta misión son "clasificados" (¿cómo se supone que iban a volver y cómo la NASA sabía del monolito?) lo que sí le cuenta a Simmons es escalofriante: poco a poco sus compañeros se volvieron locos y cometieron suicidio o intentaron matarse entre ellos por la influencia de "eso" (al parecer esta figura es un predador causante de las tormentas de arena y capaz de manipular la mente de las personas). Will creo que "eso" es una manifestación del propio planeta, como si no quisiera más formas de vida en él. Jemma, una racionalista empedernida, no cree que las explicaciones de Will y maneja la hipótesis de que no existe tal figura y que sus amigos fueron víctimas del aislamiento extremo. Pese a sus diferencias ambos aceptan trabajar en equipo. Will ha mapeado la zona y se encarga de la supervivencia (después de todo conoce cada lugar como la palma de su mano, excepto por una "zona prohibida" a la que prefiere no ingresar), mientras que Jemma se rompe la cabeza en encontrar un camino a casa. Frustrada al no hallar una solución, Jemma decide ir a la zona prohibida y se encuentra con un montón de cadáveres. Una tormenta de arena aparece aunque Jemma no se inmuta. Pero las cosas cambian cuando de entre el viento surge un figura encapuchada. "Eso" es muy real y esta ahí para matarla. Simmons siente el peligro y regresa con Will. Ya en la seguridad del refugio, Jemma esta convencida de que las historias de Will son ciertas y le muestra un sextante que tomó de uno de los cuerpos (un instrumento para medir los ángulos entre dos puntos). Inspirada, Jemma dice ser capaz de determinar dónde se abrirá el portal de nuevo, cuyo punto de salida es siempre el mismo solo que la rotación del planeta hace que parezca que cambie de lugar. Analizando las estrellas con la "antigua" computadora de Will podrá determinar los movimientos de rotación del planeta así como los movimientos de las dos lunas con las cuales parece relacionarse el monolito. Pero para esto necesitarán energía, que no tienen pues todos los aparatos de Will funcionan con luz solar, la misma que no se encuentra presente en este mundo. Jemma entonces decide usar la batería de su celular como fuente de poder y se despide de Fitz y la foto que la mantuvo cuerda por tanto tiempo. El momento es significativamente simbólico y marca la despedida con lo único que la ata a la Tierra en un esfuerzo por regresar a ella. Con la gente que quiere. La ironía es casi palpable en el ambiente. Una vez que logran encontrar el nuevo lugar donde se reabrirá el portal, ambos llegan hasta lo que debía ser un cañón pero que se ha convertido en un muro de 100 metros. A la distancia ambos ven como se abre el portal. Entonces Will toma una botella con toda la información para rescatarlos y la lanza al portal pero justo cuando va a caer, este se cierra y la botella explota en miles de pedazos. Sin una forma de poder predecir dónde se abrirá el portal de nuevo y sin haber logrado si quiera llamar por ayuda, Simmons y Will se sienten desesperanzados y, sobretodo, solos. Y es en esa soledad que Jemma encuentra sosiego en los brazos de Will. Tiempo después la pareja se encuentra incluso feliz de vivir juntos. Planean una salida romántica para ver el muy raro (y corto) amanecer. Pero cuando se encontraban celebrando con un vino antiguo que Will encontró en la "zona prohibida", los ojos de Simmons se iluminan con el reflejo de las bengalas mandadas por Fitz. Los dos corren en esa dirección pero una tormenta de arena se interpone en su camino. "Eso" sabe que sus presas estan en movimiento y sale a su encuentro. Ante la falta de visibilidad Simmons corre sin rumbo y se encuentra con quien parece ser Will en un traje de astronauta pero el mismo Will le advierte que no es él sino "eso". Le pide que se aleje mientras él enfrenta con una pistola a este maligno ser. Jemma corre al encuentro de Fitz y regresa a la Tierra. En el extraño planeta una bala retumba. El relato de Simmons se corta. Hay un silencio sepulcral que asusta a Jemma. De pronto su colega científico se levanta de su asiento y corre del lugar pero esta no es una reacción de celos. Fitz se dirige hacia el laboratorio y le dice a Simmons "lo vamos a traer de vuelta". Porque aunque le duela en el alma, Fitz siempre será su mejor amigo y hará lo que sea para hacerla feliz. Y si eso significa reabrir un portal a un mundo desconocido para traer de vuelta al hombre que le quitó el corazón de su amor, así será. Esto una muestra más del porqué amamos tanto a este personaje. En una toma final en el extraño planeta, Will sobrevivió a su encuentro con "eso". Sin una sola bala y sin la mujer que lo acompañó por seis meses, regresa a su refugio. Otro día más que pasará en soledad. ---------------------------------- Un episodio valiente (*) Agents of SHIELD no se anda con tonterías, va al grano, siendo el último episodio el ejemplo claro. Desde que vemos a Jemma Simmons afrontar con la lógica sus posibilidades en el mundo hostil, sabemos que los siguientes 45 minutos serán especiales. Desde allí todo es la lucha por sobrevivir y afrontar la falta de contacto con otra persona. Hasta que aparece Will, el astronauta. Al verlos juntos la pregunta de si se sentirán atraídos surge, después de todo son seres humanos con necesidades básicas. Primero se conocen, luego trabajan juntos para regresar a casa, pero el plan falla. Con la esperanza perdida, descubren que solo se tienen el uno al otro y resulta que no necesitaban nada más. Este debe ser el episodio más sólido de todo Agents of SHIELD, sin necesidad de contar con varios personajes. Sólido por parte de Jemma y Will, quien vivió su propio infierno durante 14 años. Y cuando pensamos cómo diablos Fitz tomará todo esto, lo vemos al final, estoico pero dolido, dispuesto a rescatar al fulano lo atrasó. Agents of SHIELD tomó una decisión valiente al separar un poco a Fitz y Simmons, algo difícil para muchos fans en aceptar, pero necesario para que esta historia no solo sea interesante, sino que sus personajes avancen, a veces al saltar a portales intergalácticos, a veces, como dijo Charlie Jane Anders en iO9, al encontrar la cosa más sorprendente de todas en un planeta loco. (*) Por Alfonso Rivadeneyra García (@ALRivadeneyra) ---------------------------------- ¿Qué te pareció este episodio? ¿Tienes más datos que te gustaría compartir? 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