Cargando...
Espectáculos

Carlos Galdós: “Este show es sanador”

Showman. Habla del show Auxilio, tengo un hijo adolescente. “Conecta con mi herida de abandono”, dice. 

larepublica.pe
Galdós es reconocido por ser un comediante de stand-up, presentador de televisión y locutor de radio peruano. Foto: difusión

“Un día, haciendo un show, conté un episodio con mi hija. Me di cuenta de que muchos padres estamos pasando lo mismo. Así que, junto con mi equipo, empecé a diseñar un show que nos pueda sostener y acompañarnos entre padres, lleno de información útil para entender a nuestros hijos y reírnos como siempre”, recuerda Carlos Galdós sobre el origen de Auxilio, tengo un hijo adolescente, puesta familiar que, debido a su acogida en Lima (sábados en doble horario en La Estación de Barranco), inicia este 8 de octubre una gira nacional.

“Lo que hago durante dos horas es explicarle a los papás ese proceso biológico llamado adolescencia, donde ocurren muchas cosas que los padres asociamos a rebeldía equivocadamente, cuando lo que está ocurriendo son cambios a nivel cerebral que hacen que los chicos tomen distancia de nosotros. A ellos se les apaga el lado del cerebro que los comunica con nosotros, es locazo”, cuenta a La República.

“Cuando vino la adolescencia de Valentina (su primogénita), me impactó bastante y me asesoré para acompañarla. Y a propósito del show, he conversado con neurólogos, psicólogos, terapeutas y he leído libros de neurociencia y he armado este show basado en la adolescencia de mi hija y sobre lo que está pasando con nuestros hijos adolescentes”.

Galdós, cuyos espectáculos se caracterizan por ser para adultos, señala que Auxilio, tengo un hijo adolescente, se ha convertido en un show familiar. “Es curioso, van niños de 8 años y, por otro lado, los más grandes chicos van a regañadientes porque piensan que Galdós los hará papilla y en realidad es al revés. Con quien me meto es con los papás, los hago papilla (ríe). Y, además, es un punto de encuentro donde padres e hijos están en el mismo nivel”.

-La etapa que tocas es amplia y polémica a la vez.

-Sí, y yo en cada función salgo agradecido porque en estas dinámicas, donde cuentas cosas, hay algo sanador. A mí este tema me ha apasionado bastante porque conecta con mi herida, que es una herida de abandono. Entonces, estoy en modo potencia papá, respecto al papá que yo no tengo. Por eso me moviliza tanto el tema, inclusive yo hablo algo y es casi testimonial. Todas las semanas investigo más y tanta información, tengo que los jueves en mi canal de YouTube hago un en vivo a las 8 p.m. sobre el tema. Es un show sanador.

-¿Y cómo toma tu hija que fue tu inspiración para el espectáculo?

-Le conté que haría un show que se anclaba en su adolescencia: “Mira, voy a contar cómo he vivido yo tu adolescencia o cómo la estoy viviendo. ¿Me das permiso?”. Vio un ensayo, me dijo: “Todo bien”. A veces va y se mata de risa.

-Coincides con algunas voces que señalan que ellos fueron las grandes víctimas de la pandemia.

-De hecho, no profundizo en la pandemia. Toco puntos como la puerta cerrada, el primer amor, no me escucha, me responde con sonidos, la sensación de que nos odia, entre otros. En realidad están construyendo su propio monstruo y, en todo caso, desde la desinformación, todos la pasan mal. Si quieren verme fuera de Lima, estaré este mes en Trujillo (8), Piura (15), Chiclayo (22), Arequipa (29) y Cusco (5 de noviembre).