En el año 2012, Ramiro Saavedra llegó a las instalaciones de Latina para realizar su casting y poder concursar en Yo soy, pero nunca imaginó que su talento lo llevaría a ser reconocido como el mejor imitador del país del cantante estadounidense. Su caracterización como Kurt Cobain, el vocalista de la banda Nirvana, sorprendió a los seguidores del reality y al jurado del programa desde el primer momento en que subió al escenario.
Tras una reñida competencia a lo largo de la temporada, el arequipeño de 27 años se enfrentó en la gran final con ‘Juan Gabriel’, Ronald Hidalgo. Sus fans gritaban el nombre Kurt hasta que el jurado le dio la victoria. No faltaron los aplausos, los gritos y las lágrimas.
Sin embargo, pese a que se realizó varias temporadas con los ganadores en Yo soy, grandes batallas, Ramiro Saavedra jamás volvió al escenario del programa.
En 2007, el artista peruano fundó la banda Olaf, con la que realiza tributos a grupos como Pearl Jam, Oasis, REM, Bon Jovi, Guns N ‘Roses y Nirvana.
No solo ganó popularidad en el Perú, también lo hizo internacionalmente. En 2015, Ramiro Saavedra participó en el concurso La conquista de América en Colombia. Muchos portales extranjeros lo señalaron como ‘la encarnación’ de Kurt Cobain.
El diario The Huffington Post afirmó que el músico peruano hacía una imitación “casi perfecta”. También, fue entrevistado por la BBC de Londres sobre su admiración por el fallecido cantante.
Pero entre sus reconocimientos más importantes destaca el saludo de Nirvana. La cuenta oficial de Facebook le dedicó un mensaje en el que destacó su parecido con el líder de la banda.
El imitador de Kurt Cobain ahora es músico, cantante, guitarrista y compositor. Ha realizado shows en diferentes partes del país y tiene una gran legión de fans en Arequipa.
Incursionó en la plataforma YouTube con videos en los que aparece cantando covers y dando su opinión sobre el estilo de canto de famosos artistas.
El ‘Kurt Cobain peruano’ continúa con una apariencia muy similar a la del fallecido cantante de Nirvana. En sus fotos de Instagram, muestra su cabellera rubia y lacia, y poca barba.
El ‘Kurt Cobain peruano’, Ramiro Saavedra. Foto: Facebook
El ‘Kurt Cobain peruano’, Ramiro Saavedra. Foto: Facebook
El ‘Kurt Cobain peruano’, Ramiro Saavedra. Foto: Facebook
Durante los castings para la primera edición de Yo soy, Ramiro Saavedra impresionó al panel de jurados, en ese momento conformado por Ricardo Morán, Maricarmen Marín y Fernando Armas, por su impresionante parecido con el vocalista de Nirvana. Saavedra se ganó los halagos de los expertos y aseguró su participación en el programa de imitación.
El músico utiliza su perfil oficial de Instagram para compartir momentos de su día a día, así como promocionar su canal de YouTube. El 15 de enero celebró llegar a los 10 mil seguidores en la red social.
Imitador de Kurt Cobain alcanza los 10 mil seguidores. Foto: captura de Instagram
El arequipeño reveló mediante entrevista con El Comercio que su gusto por la banda de Nirvana empezó cuando se encontraba en un momento duro de su vida. “Fue durante un viaje a Lima que mi primo Rodolfo me mostró un casette de Nirvana y me enamoré. Lo escuchaba mañana tarde y noche. En ese mismo año (1994), el 12 de noviembre, murió mi abuelo. Kurt Cobain, había muerto en abril. Fue muy duro, me deprimí, me aferré a la guitarra, me dejé crecer el cabello y me dediqué a cantar temas de Nirvana”.
Ramiro Saavedra escuchó por primera vez a Nirvana en un momento duro de su vida. Foto: Ramiro Saavedra/Instagram.
El imitador de Kurt Cobain, Ramiro Saavedra, anunció la muerte de su abuelita, a través de sus redes sociales donde dedicó un emotivo mensaje contando detalles de todo lo que vivió junto a la mujer que lo crió durante su infancia.
Ramiro Saavedra quedó devastado con la muerte de su abuelita. Foto: Ramiro Saavedra/Instagram
En ese sentido, escribió: “La verdad es que siento que todo tiene en parte de cierto, pero lo que más reconforta es saber y ser consciente que en vida le dimos todo. Viví con ella prácticamente toda mi vida. Era la esposa de mi abuelito el cual me dejó mi primera guitarra. Cuando llegaba la de tocar, sienpre nos decía: “tienen todas sus cosas? Revisen que no les falte nada” nos esperaba despierta en la madrugada hasta que llegáramos de tocar y le gustaba que seamos músicos porque su esposo también lo fue. Le gustaba cantar y creo que también por ahí vino el alma artística que llevamos dentro”.