Por mayoría, la Comisión de Energía y Minas del Congreso aprobó un dictamen que faculta a las mypes elegir entre el mercado libre o regulado de electricidad, con el objetivo de abaratar sus costos y propiciar su reactivación económica.
Es menester recalcar que en el Perú los usuarios cuya demanda anual sea igual o menor a 200 kw estarán sujetos a precios regulados por Osinergmin. Aquí, encontramos a las pequeñas bodegas o negocios que a fin de mes pagan una tarifa a Enel o Luz del Sur; mientras que, los que superan este umbral y llegan a 2.500 kw, pueden escoger entre ser regulados o libres.
Quienes pasan los 2.500 kw tienen la condición de usuarios libres, es decir, acuerdan un contrato con un generador de energía y fijan el precio a pagar, así como la potencia mínima facturable, plazos de pago y factores de actualización de precios, principalmente, señala a La República, Erick García, exdirector general de Hidrocarburos del Minem.
Así, en la práctica los usuarios libres pagan menos que los regulados, a pesar de abarcar poco menos de la mitad del total.
El dictamen —que ahora deberá agendarse en el Pleno del Congreso— estima que aproximadamente 600.100 usuarios estarían en capacidad de migrar al mercado libre. La reducción del umbral de potencia sería gradual, y entraría en vigencia desde 2025 hasta 2029 porque "será concordante con el vencimiento de contrato de largo plazo de las empresas distribuidoras" y "no se quiere causar un mayor impacto" en estas.
"La ventaja está en el acceso a tarifas competitivas para las mypes mediante el ahorro de precios de energía y la libertad de contratar. Este cambio significaría la reducción del precio final (que pagan) y un ahorro de entre 4 a 15%", reza el texto leído en la Comisión de Energía y Minas.
García considera que la reducción del umbral a 50 kW es auspiciosa porque fomentará la competencia en el sector de suministro de energía, y, como sucede en otros países, aparecerán empresas distribuidoras que entregarán un servicio más eficiente a beneficio del usuario final.
Sin embargo, Rafael Laca, especialista de Enerkory, recomienda al Ministerio de la Producción (Produce) capacitar a los potenciales beneficiarios —como los talleres de Gamarra o de mecánica—, porque en el mercado libre no existe Osinergmin, y la instancia definitoria es la judicial.
Laca advierte que algunas empresas pueden aprovecharse de la inexperiencia y plantear precios marginales, cuando estos, ante cualquier imprevisto, pueden elevarse y hacer que terminen pagando precios más caros.
● Margen. Según datos sectoriales, los clientes del mercado libre energético acceden a precios 30% más baratos que los regulados.
● Beneficio. El dictamen estima un ahorro de entre 4% y 15% en los precios que pagarían las mypes.