Durante el 2022, el sector inmobiliario pudo concretar la venta de 16.000 viviendas nuevas en Lima y Callao, logrando un crecimiento de apenas 3% frente a lo colocado en el 2021, según cifras de la Asociación de Empresas Inmobiliarias del Perú (ASEI).
Sin embargo, a pesar de que se haya registrado un resultado positivo, aún no se logra superar los niveles obtenidos previo a la pandemia.
"En el 2019 llegamos a las 20.000 viviendas y ahora estamos 20% por debajo", explicó a La República Juan Carlos Tassara, presidente de ASEI.
No obstante, para el 2023, la expectativa de los agentes inmobiliarios es que el sector pueda seguir creciendo, aunque tampoco se llegaría a las ventas del 2019 debido a la inflación y al incremento de las tasas de interés en los créditos hipotecarios.
En esa línea, tanto ASEI como la Asociación de Desarrolladores Inmobiliarios (ADI) señalaron que el Gobierno debe otorgar más recursos al Fondo Mivivienda (FMV) para que dinamice más al sector, ya que existe una demanda insatisfecha de vivienda de interés social, precisamente el segmento que concentra la mayor venta de inmuebles.
"El 2022 y 2021 han sido duros para todas las industrias y el inmobiliario no ha sido la excepción. La oferta ha bajado y eso hace que no podamos satisfacer la demanda, sobre todo en segmentos de Mivienda y Techo Propio, que son proyectos a largo plazo", añadió Tassara.
Aunque los gremios inmobiliarios indicaron que las ventas de vivienda no se verían impactadas por la actual convulsión social, sí provocaría que la decisión de compra de un inmueble se postergue por algunas semanas producto de las restricciones de tránsito que existen.
"El segmento C y D necesita una casa sí o sí, entonces, no es una decisión que puedan postergar mucho, de repente la posponen un fin de semana porque la vía está cerrada, pero cuando esto se abre esas personas van a los lugares de venta o vía digital y se involucran en el proceso de compra", precisó a este medio Antonio Amico, presidente de ADI.
El incremento en el precio de los materiales de construcción se ha visto reflejado en el valor de la vivienda, que de enero a noviembre del 2022 tuvo un aumento de 4,4%, pasando a costar en promedio S/7.417 el metro cuadrado en Lima y Callao.
Al respecto, el presidente de ASEI mencionó que "mientras siga habiendo escenarios inflacionarios y subida de precios en los materiales de construcción, ese crecimiento se verá reflejado en el precio de las viviendas".
En tanto, el representante de ADI estimó que podría haber un incremento de alrededor del 8%; no obstante, consideró que no podría sentirse mucho el impacto debido al incremento que se ha dado a los subsidios habitacionales que otorga el Estado.
En detalle, el Bono Familiar Habitacional ahora es de S/43.312,5 para la compra de una vivienda y de S/29.700 para la construcción de una casa. En tanto, el Bono del Buen Pagador oscila entre los S/10.800 y los S/25.700, según sea el valor de la vivienda a adquirir.
Finalmente, respecto a la tasa de interés del crédito hipotecario, que se puede encontrar en 9,5% y 10%, el presidente de ASEI mencionó que este indicador podría seguir subiendo si continúa la inestabilidad política.
"Si realmente seguimos con una política inestable, las tasas (de crédito hipotecario) podrían subir como lo hemos tenido antes, a 12% o 15% anual", finalizó.
Juan Carlos Tassara, presidente de ASEI, revela que, debido al clima político, los empresarios inmobiliarios están siendo muy cautelosos con sus inversiones.
"Las inversiones están muy cautelosas, seguimos en un periodo de incertidumbre. Hasta que eso no pase, quiere decir que las inversiones van a estar más cautelosas", agrega.
Por su parte, Antonio Amico, presidente de ADI, señala que sí se está invirtiendo en el sector, sin embargo, ahora se está apostando por zonas donde las empresas inmobiliarias tienen otros proyectos.
"Vamos a invertir, pero en lugar de ser más audaces e invertir en zonas donde no estamos, desarrollaremos proyectos donde se ha comprobado que el mercado funciona", anota