El Gobierno colombiano, a través de la Aeronáutica Civil, negó el martes 8 de noviembre la unificación entre Avianca y Viva Airlines en un solo grupo comercial bajo el argumento de que afectaría la libre competencia.
Por ello, el miércoles 23, Avianca anunció que apelaron la decisión del organismo y manifestaron su disposición a proponer soluciones, que resuelvan las inquietudes de las autoridades sobre el hecho de que ambas compañías hagan parte de un mismo grupo empresarial.
“Estamos abiertos y dispuestos a seguir construyendo la historia de Colombia y a contribuir con el fortalecimiento del mercado aéreo para que el país esté cada vez más y mejor conectado”, expresó el presidente de Avianca, Adrián Neuhauser.
Para eso, Neuhauser indicó que ponen “sobre la mesa distintas alternativas para que la autoridad pueda estudiarlas a la luz de proteger la mayor cantidad de empleos formales; mantener la conectividad regional que ofrece Viva; así como su marca y lo que la hace especial. Todo esto, encaminado a asegurar el bienestar general de los usuarios del transporte aéreo”.
Cabe precisar que en agosto, las aerolíneas sometieron a control de la autoridad aeronáutica la operación de integración, pero el ente concluyó, después de un análisis de un equipo técnico y jurídico, que eso “representa riesgos para la competencia en el sector y el bienestar de los consumidores”.
Entre los argumentos que dio el Gobierno están que “este grupo económico alcanzaría el 100% de la participación en 16 rutas nacionales” y que, “en términos de libre competencia, significaría un retroceso y volver a niveles que no se veían en el país hace más de 7 años”.
Para convencer a la Aerocivil, Avianca y Viva presentaron una propuesta que, consideran, ayudará en la “búsqueda de que el sector aéreo verdaderamente sea para todos y que la conectividad de Colombia, sus regiones y sus viajeros sean la prioridad”.
El primer punto de la iniciativa de las aerolíneas busca disminuir su participación en el aeropuerto El Dorado de Bogotá, es decir, “devolver un porcentaje relevante” de los permisos de aterrizajes y despegues a la Aerocivil y ceder algunos de ellos a competidores para que otras compañías, “si así lo desean”, aumenten sus operaciones en la capital.
Asimismo, proponen que siga existiendo la marca Viva y su modelo de bajo costo, lo que les permitirá preservar el mayor número de empleos, buena parte de sus aviones y la operación de las rutas a las que esa compañía vuela de manera exclusiva.
También pretenden proteger las tarifas “en las tres rutas en las que ambas aerolíneas pasen a tener el 100% de operación como resultado de la transacción”, según el comunicado.
Finalmente, la propuesta prevé mantener los acuerdos interlínea de Viva, con lo que se aseguraría “la conectividad que esta empresa brinda a pasajeros y a otras aerolíneas”.
Con información de EFE.