Los efectos de las elecciones primarias han remecido la economía de Argentina. El peso se desmoronó frente al dólar, la bolsa argentina reaccionó con una de sus peores jornadas históricas y la prima de riesgo se disparó a su máximo en la era Macri, mientras este y el vencedor de las elecciones, Alberto Fernández, se intercambian las culpas por las turbulencias económicas que aún persisten este martes.
Para entender este escenario de incertidumbre económica revisemos las siguientes claves:
Intranquilidad en los mercados
La mañana siguiente a las elecciones, Argentina se despertó con un fuerte revés de parte de los inversores locales y extranjeros, con un desplome histórico de la bolsa, que perdió un 37,93 % al final de la jornada, mientras el dólar pasó de cotizar de 45 a 60 pesos, para estabilizarse en 55 al final del día. Hoy, la tormenta disminuyó en la bolsa, pero la moneda argentina sigue en caída puesto que el dólar cerró a 58 pesos, tres más que ayer.
La crisis puede recrudecerse
La actual crisis económica argentina, que comenzó en abril de 2018, tuvo ya en junio y agosto de ese año dos corridas similares. La inflación creció un 2,7 % en junio, una cifra baja comparada con la de otros meses de la crisis, y se espera que el dato de julio siga esa tendencia, pero el problema es que esos datos positivos quedan desactualizados por el escenario poselectoral. En el país suramericano, un 32 % de la población vive en la pobreza según datos oficiales.
Unas elecciones primarias que no servían para nada pero que sirvieron para todo
Las encuestas vaticinaron un resultado casi parejo e incluso los mercados respondieron antes de tiempo con una muy buena jornada bursátil el viernes previo a los comicios. Las encuestas y los mercados se equivocaron.
Esta gran macroencuesta de facto tuvo un efecto tan palpable el día siguiente porque, al ser la diferencia tan amplia, dejó la partida definida para las elecciones que valdrán, las presidenciales del 27 de octubre: si Alberto Fernández saca los mismos resultados, será presidente sin segunda vuelta ya que solo necesita el 45 % o más del 40 de ventaja sobre el segundo.
Alberto Fernández le pasa el balón a Macri
El resultado electoral deja a Alberto Fernández en la mejor posición posible ya que en una de sus primeras declaraciones, tras el mal comportamiento de la economía, se refirió a que es Mauricio Macri quien debe ocuparse de ello. “Estamos empezando una campaña nuevamente, el Gobierno tiene que gobernar, nosotros somos oposición”, dijo a su salida de una reunión con Cristina Fernández.
Las promesas económicas de Macri
En una rueda de prensa el lunes por la tarde, el presidente prometió tomar medidas ante la fuerte depreciación del peso, minutos después de que su rival en las elecciones le pidiera a él que se hiciese cargo. Además, aviso a los ciudadanos de que lo sucedido el lunes es una muestra de lo que puede pasar en octubre si el Frente de Todos llega al poder, y él insiste en que el único camino posible para que Argentina mejore es el que propone su Ejecutivo.
Incertidumbre hasta navidad
Así como nadie vio llegar la sorpresa política del domingo, es difícil predecir qué sucederá hasta octubre, fecha de las presidenciales, y menos hasta diciembre, cuando asumirá el nuevo gobierno.
FUENTE: Agencia EFE