Hugh Jackman fue el responsable de dar vida a Wolverine, el icónico mutante miembro de los X-Men, durante 17 años. Luego de nueve películas, el actor finalmente se despidió del personaje en Logan (2017).
El filme es recordado por los fans debido a la carga dramática y el digno cierre que le dieron al héroe. En ese sentido, el australiano también revivió su experiencia grabando la cinta para Variety,
En la entrevista, Hugh Jackman dio a conocer que la desgarradora escena final donde se sacrifica por su hija se filmó antes de lo previsto. El director James Mangold fue quien insistió en llevarla a cabo.
“Estábamos rodando a gran altura y había tormentas eléctricas por todas partes, y tuvimos que parar. Él sólo dijo: ‘Vamos a hacer la escena de la muerte’. [...] Y dije: ‘Está bien’. Él sabía que era lo mejor para mí”, detalló.
Imagen promocional de "Logan"
Asimismo, reveló que ya había decidido que no volvería a ser Wolverine, durante la escritura del guion de Logan. Por este motivo, se involucró de sobremanera en el proyecto.
“Había muchos sentimientos encontrados al final, porque lo interpreté durante mucho tiempo. Sabía que iba a ser mi última [película] antes de que la escribiéramos. Tomé esa decisión. Había una carga de expectativas. Estuve súper implicado”, finalizó.
Por primera vez, Wolverine no cuenta con sus poderes y se encuentra vulnerable en un mundo donde los X-Men son leyenda. Su mentor, Charles Xavier, lo convence para asumir una última misión: proteger a una joven que será la única esperanza para la raza mutante.