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Ciencia

Científicos documentan el viaje de mariposas desde África hacia Sudamérica: más de 4.000 kilómetros

¿Qué tan lejos puede volar una mariposa? Un equipo de científicos confirma que, con sus 5 centímetros, las de una especie atraviesan el océano Atlántico para viajar de un continente a otro.

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El estudio inició por haberse hallado mariposas en Guyana Francesa, en Sudamérica. Foto: composición LR/ Cesare Brizio / Aptus

Un récord para un insecto. Existen alrededor de 17.500 especies de mariposas en todo el mundo, de distintos colores y características únicas. Entre ellas, la mariposa de los cardos destaca por volar largas distancias. Recientemente, un equipo de científicos descubrió que cruzan el océano Atlántico desde África hasta Sudamérica.

Anteriormente, investigadores estudiaron la ruta de migración de las Vanessa cardui (nombre científico de la mariposa) desde Europa hasta África. En ese entonces, se identificó que alcanzan alturas de 1.000 metros y atraviesan montañas con temperaturas cercanas a los 0 grados Centígrados para emprender su viaje al Sur. Con los recientes hallazgos, se estima que este increíble animal vuela por todo el mundo.

El viaje de la mariposa pintada

La mariposa de los cardos, también conocida como dama pintada, recorre más de 4.200 kilómetros entre cinco y ocho días, según el reciente estudio liderado por el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC). La investigación empezó a partir de que Gerard Talavera, investigador del Instituto Botánico de Barcelona identificara a insectos de esta especie en playas de Guayana Francesa.

El avistamiento de damas pintadas en Sudamérica sorprendió a los científicos porque no había registros de su presencia en esta parte de la Tierra. Entonces, utilizaron un enfoque multidisciplinar para descifrar su ruta. Partieron de las posibilidades de que podrían haber partido de Norteamérica, África o Europa, que es donde se sabe que están.

La mariposa de los cardos es famosa por realizar migraciones masivas a largas distancias. Foto: Iain H. Leach

 Los científicos analizaron la trayectoria de los vientos y observaron un patrón sostenido de dirección desde el oeste de África. A ello, se sumó el descarte de que sean de Norteamérica porque coincidía con poblaciones de los otros continentes donde habita.

Para, finalmente, descubrir el punto de partida, analizaron el ADN del polen que las mariposas aún conservaban en sus cuerpos. Así, identificaron que el polvillo procedía de dos especies de flores de África tropical. Por lo tanto, quedó demostrado el paso de los insectos por este continente antes de llegar a Sudamérica, evidencia de que atravesaron el océano Atlántico.

¿De dónde venían las mariposas?

El equipo de investigadores analizó isótopos estables (microscópicas partículas de átomos) de hidrógeno y estroncio presentes en las alas de las mariposas, según se indica en una publicación oficial del CSIC. A partir de ello, se identificó que el origen de las viajeras ha sido, probablemente, países del oeste de Europa, como Francia, Irlanda, Reino Unido o Portugal.

Las mariposas cumplen un importante rol en la polinización de plantas. Foto: Ángel Medina G. / EFE

“Las mariposas de los cardos llegaron a Sudamérica desde el oeste de África, volando como mínimo 4.200 kilómetros sobre el Atlántico. Pero su viaje pudo ser todavía más largo, iniciándose en Europa y pasando por tres continentes, lo que supone una migración de 7.000 kilómetros o más, un hito extraordinario para un insecto tan pequeño”, declaró, para el comunicado, Clément Bataille, coautor del estudio.

“Solemos ver las mariposas como símbolo de la fragilidad de la belleza, pero la ciencia nos demuestra que pueden realizar hazañas increíbles. Aún queda mucho por descubrir de sus capacidades”, dijo Roger Vila, investigador del Instituto de Biología Evolutiva y también coautor.

¿Cómo lograron tan largo viaje?

Los científicos afirman que las mariposas solo habrían podido completar el viaje con una estrategia que consiste en alternar el mínimo esfuerzo activo para no caer al mar y aprovechar los vientos. “Calculamos que, sin viento, las mariposas podrían haber volado un máximo de 780 kilómetros hasta consumir toda su grasa y, por tanto, su energía”, ha explicado Eric Toro-Delgado, uno de los autores.

Gerard Talavera, líder de la investigación, sugiere que el hallazgo “abre nuevas perspectivas sobre las capacidades de los insectos para dispersarse a largas distancias, incluso a través de mares y océanos”. “A lo largo de la historia, los fenómenos migratorios han sido importantes en definir las distribuciones de las especies tal y como las observamos hoy en día”, agrega.

Aunque muchas mariposas tienen una vida adulta corta, la mariposa de los cardos puede vivir hasta varios meses en condiciones favorables. Foto: Jean Pol Grandmont

Asimismo, advierte que los efectos del calentamiento global podrían ocasionar consecuencias significativas para la distribución de la biodiversidad y ecosistemas en todo el mundo. De no existir las condiciones necesarias para trasladarse, como el caso de la mariposa de los cardos, muchas especies podrían estar imposibilitadas de migrar para sobrevivir a climas no apropiados y sus poblaciones disminuirían hasta desaparecer con el pasar del tiempo.