Crean concurso para encontrar al doble de Jaime Bayly de joven y ganador se vuelve viral: "Se parece más a Federico Salazar"
En la Residencial San Felipe, en Jesús María, se organizó un concurso para hallar al doble de Jaime Bayly en su juventud. El ganador sorprendió a todos al ser comparado con otros personajes peruanos como Federico Salazar, generando una avalancha de reacciones en redes sociales.
El último 1 de diciembre, la emblemática Residencial San Felipe, ubicada en el distrito de Jesús María, fue escenario de un insólito evento: un concurso para encontrar al doble de Jaime Bayly en su juventud. Esta peculiar iniciativa buscaba rendir homenaje al reconocido escritor y periodista peruano, cuya irreverencia y estilo inconfundible lo han consolidado como una figura mediática de trascendencia internacional.
El certamen despertó gran interés entre los vecinos y fanáticos del conductor de televisión, llegando muchos de ellos a compartir las imágenes del evento en redes sociales como X y TikTok. Sin embargo, lo que más llamó la atención fue el resultado final. Aunque el ganador cumplía con varios rasgos físicos del autor de No se lo digas a nadie, muchos no tardaron en señalar un inesperado parecido con otros personajes como el conductor Federico Salazar o el exasesor del gobierno de Alberto Fujimori, Vladimiro Montesinos.
Ganador del concurso para encontrar al doble de Jaime Bayly de joven se vuelve viral
El ganador del concurso, de nombre Sebastián, logró destacarse entre los demás participantes por su look ochentero que evocaba la época en la que Jaime Bayly daba sus primeros pasos como conductor de televisión. Vestido con un terno negro y luciendo un peinado clásico con unos lentes similares a los que solía usar el periodista, el aspirante logró captar la atención de los jurados, quienes evaluaron tanto el físico como la actitud de cada concursante.
En una video publicado por César Guarniz en TikTok se observa al joven que ocupó el primer lugar imitando al escritor con la frase: “Dígame doctor García, ¿usted cree que su gobierno fue realmente deplorable como dicen muchos peruanos?”
En redes sociales, muchos usuarios señalaron que el joven tenía mucho más parecido con otros personajes peruanos antes que con Bayly, como los periodistas Federico Salazar, Jaime Chincha, el actor Gustavo bueno e incluso Vladimiro Montesinos.
"Está lindo, como Jaime Chincha joven. Era Jaime Bayly no Federico Salazar. Se parece más a Gustavo Bueno de joven. Se parece más a Vladimiro Montesinos. Parece más a Montesinos que a mi guapo Bayly. Creo que él estaba yendo al concurso de personas parecidas a Federico Salazar. Jaime Bayly de temu. ¿Y por qué Montesinos quiere ser Bayly?”, fueron algunos de los comentarios en TikTok.
El último 1 de diciembre se realizó un concurso para encontrar al doble de Jaime Bayly de joven. Foto: Danza Diacrítica.
¿Cómo era Jaime Bayly de joven?
Jaime Bayly inició su carrera televisiva a los 18 años en el programa Pulso, transmitido por Panamericana Televisión. Desde el principio, su carisma y habilidad para conectar con la audiencia lo convirtieron en un talento prometedor. Su estilo, mezcla de humor ácido y análisis crítico, pronto lo posicionó como una de las figuras más polémicas y queridas de la televisión peruana.
En sus años de juventud, Bayly se caracterizó por su actitud rebelde y su interés por temas controvertidos, características que también plasmó en sus novelas. Su obra literaria y su trayectoria mediática reflejan un espíritu irreverente que lo ha acompañado a lo largo de su vida. Hoy, a pesar de residir en Miami, su legado sigue siendo motivo de admiración y reconocimiento en su tierra natal.
Jaime Bayly y Federico Salazar de joven. Foto: composición LR / Diners / Panamericana TV.
¿Cómo era Federico Salazar de joven?
Por otro lado, Federico Salazar, actual conductor de noticieros y una de las caras más respetadas del periodismo en Perú, también inició su carrera a una edad temprana. A diferencia de Bayly, Salazar se inclinó por la presentación de las noticias, lo que le valió una reputación de profesionalismo y credibilidad.