Tres corredores esperan compensaciones y otros dos aún no tienen fecha de retorno
Estado les adeuda S/300 millones, pero hace falta una adenda y que la ATU actualice su reglamento. Operadores de corredores Azul, Rojo y Morado señalan que pago servirá para cubrir deudas financieras y comprar más unidades. Corredor Amarillo sigue sin regresar desde abril del 2023. Corredor Verde afronta un arbitraje con la ATU.
En julio pasado se cumplieron 10 años desde que empezaron a funcionar, de forma progresiva, los cinco corredores complementarios de Lima con la consigna de que con sus 5.000 buses se consiga retirar a las combis y cústeres que generan caos y congestión. Sin embargo, hasta la fecha, solo preoperan tres de ellos y su flota apenas supera las 550 unidades en total.
La situación es preocupante porque, después de la pandemia del Covid-19, los tres corredores operativos tienen que competir con autos colectivos, los cuales ganaron terreno en el Gobierno de Pedro Castillo y ahora están empoderados con el actual Congreso que pretende formalizarlos en la capital.
“Hasta noviembre del 2023, el Estado nos adeudaba S/300 millones por compensaciones a los cuatro corredores (incluyendo al Amarillo, que dejó de circular en abril de ese año)”, afirma el vocero del Corredor Morado, Gerardo Hermoza. Así, los corredores Morado, Azul y Rojo esperan compensaciones; mientras que los otros dos suspendidos (Amarillo y Verde) se encuentran aún sin fecha de retorno.
Para intentar mejorar esta situación, y luego de llegar a acuerdos con los operadores, el Ejecutivo publicó, en setiembre último, el Decreto Legislativo n° 1678, en el que se establecen medidas para la continuidad de los corredores viales.
Con esta norma, la Autoridad de Transporte Urbano (ATU) podrá negociar modificaciones a los contratos de concesión de los corredores. Además, podrá incidir en la regulación de sus tarifas; así como suscribir y ejecutar acuerdos de pago de indemnizaciones. Fuentes del Ejecutivo señalaron que, para empezar a cumplir con las medidas, se espera que la ATU termine de actualizar su Reglamento de Organización y Funciones (ROF). Tiene plazo hasta fines de enero.
Problemas en el Morado
El Corredor Morado es el más golpeado y el que más oxígeno necesita. El Estado le debe, por compensaciones, S/120 millones, por lo que su vocero espera que la ATU pueda convocarlos para tener un cronograma de pagos por partes.
“El acuerdo firmado con el Ejecutivo es que las compensaciones serán para pagar la deuda financiera y para la compra de nuevos buses. No va a ser para ganancias”, señaló Hermoza.
En la actualidad, el Corredor Morado traslada a cerca de 80.000 pasajeros diarios a través de sus 170 buses y cuatro rutas, desde San Juan de Lurigancho (SJL) hasta San Isidro y Magdalena.
“En estas semanas estamos siendo afectados en la avenida Abancay por el cierre del puente Ricardo Palma y las protestas que ocurren frente al Congreso. Eso nos está generando pérdidas porque los buses deben ir por otras vías. Además, el municipio de Lima no gestiona bien el tránsito. La ATU le ha solicitado que autorice más vías segregadas para el Corredor Morado y nada. Ahora, el municipio realiza trabajos en el túnel Santa Rosa en hora punta sin coordinar con la ATU y nos perjudica”, criticó Hermoza.
Se viene alza de tarifa
A eso, dijo, se suma la falta de mayor fiscalización para retirar a los colectivos y mototaxis. Ayer, por esquivar a una de estas últimas unidades, un bus del Corredor Morado chocó con un poste y dejó 18 heridos en la av. Wiesse, de SJL.
Debido a estos problemas, la ATU informó que desde mañana viernes la tarifa general del Corredor Morado se elevará de S/2,50 a S/2,80, pero con algunos beneficios. Por ejemplo, los usuarios podrán viajar en dos servicios por el mismo precio, siempre y cuando el segundo bus lo tome en uno de los paraderos de la avenida Abancay. Asimismo, el pasaje costará S/2 desde esos puntos de Abancay hacia Magdalena (ruta 404), San Isidro (405) y Washington (406).
Fiscalización en el Azul
Al Corredor Azul, el Ejecutivo le adeuda S/20 millones. Pese a ello, su vocero Luis Morán confía en que pronto se materializará el cronograma de pago con el decreto que se aprobó en setiembre.
Este corredor traslada a 75.000 pasajeros diarios, entre el Rímac y Miraflores-Barranco; esto pese a sufrir la competencia de los colectivos que van por las avenidas Tacna, Garcilaso y Arequipa. “Tenemos 140 buses y esperamos contar con 40 más el próximo año. Hay luz al final del túnel”, afirmó Morán.
Agregó que si bien, en estos dos meses, la ATU ha repotenciado los operativos contra los colectivos, aún no implementa la fiscalización electrónica que sería importante. “Estamos proponiendo que haya ‘zonas pagas’ que son espacios pequeños donde se cobra el pasaje en el paradero, con el fin de que los usuarios suban directo al bus y el viaje no demore”, indicó.
Cambios en el Rojo
En el caso del Corredor Rojo, el Estado le debe S/143 millones por compensaciones.
Actualmente, es el de mayor flota vehicular, ya que preopera con 243 buses y traslada a 172.000 pasajeros diarios. “Atendemos a los estudiantes de varias universidades respetando el medio pasaje. Nuestro compromiso es tener 74 unidades nuevas tras el pago de las compensaciones”, dijo el representante del Corredor Rojo, Ángel Mendoza.
También señaló que, en estos dos meses, han habido mejoras operacionales. Por ejemplo, la ruta 209 ha vuelto a circular por la Carretera Central y se espera que la ruta 204 modifique su recorrido hacia el Callao, al girar por la av. Pershing y continuar por la av. Javier Prado Oeste, cruzando la av. Brasil, para volver por la av. Sucre a la av. La Marina.
“Se están ultimando detalles, porque así podremos tener una tarifa integrada con el Corredor Morado, con descuentos”, indicó.
Incertidumbre en el Amarillo
Pero, ¿por qué no regresa el Corredor Amarillo, que conectaba el Callao con Surco, por la Panamericana Norte, Evitamiento y Panamericana Sur? El exjefe de la ATU, José Aguilar, explica que este servicio aún no estaba ni en fase de preoperación, como el Azul, Rojo y Morado. “No podía subir su tarifa porque, al estar en esa situación, el contrato de concesión lo prohibía. Por eso tuvo que salir de las vías porque no cubría sus costos”.
Consultado sobre este tema, el actual presidente de la ATU, David Hernández, no pudo dar una fecha exacta del retorno del Corredor Amarillo; aunque estimó que sería en el 2025. También añadió que hay la intención de que empresas, como El Chino, Evipusa y Sol de Oro, participen de la licitación y se incorporen al servicio”.
En tanto, Ángel Mendoza, quien también es vocero del Corredor Amarillo, dijo que se viene coordinando con el MTC y el MEF para firmar una adenda estructural del contrato de concesión de los corredores, con el objetivo replantear el modelo económico financiero.
“Para que sea autosostenible y que haya subsidios cuando existan fallas o suba el pasaje”, dijo. Agregó que con esta adenda, en el 2027, cuando se relancen los 36 paquetes de rutas restantes de los corredores, “más empresas privadas se sumarán al proyecto”.
Finalmente, en el caso del Corredor Verde, se conoció que los concesionarios buscan regresar, pero ahora vienen afrontando un arbitraje con la ATU. Los corredores, en pocas palabras, necesitan una mano.
Congresistas pro colectiveros
“Si los congresistas aprueban la ley que formaliza a los colectiveros de Lima y Callao, los denunciaremos penalmente por estar en contra de los contratos de concesión de los corredores, el Metropolitano y el Metro”, aseveró el vocero del Corredor Morado, Gerardo Hermoza.
Agregó que la solución es la macro y no la micro transportación. “Un bus lleva la misma cantidad que 20 colectivos, además que es más seguro y formal”.
El vocero del Corredor Rojo también afirmó que la ATU ya se mostró en contra de esa nefasta iniciativa.
Pese a los cuestionamientos, la Comisión de Transportes acaba de aprobar un dictamen que pretende formalizar a los autos colectivos de Lima y Callao. Ahora todo depende del Pleno.