El desértico cerro de SMP que sería el nuevo pulmón verde de Lima:¿quién es el argentino detrás del proyecto La Milla?
Un cerro árido en San Martín de Porres se convierte en un símbolo de esperanza y biodiversidad gracias a la iniciativa de un geólogo argentino. Emiliano Cacciavillani y un grupo de voluntarios trabajan incansablemente para restaurar la flora y fauna de la zona.
El proyecto Cerro La Milla no solo busca reforestar un área desolada, sino también preservar especies en peligro de extinción, como el gecko limeño. Esta crónica narra el esfuerzo comunitario que está transformando un paisaje inhóspito en un bosque vibrante. Con el apoyo de la comunidad y un enfoque en la sostenibilidad, el proyecto se perfila como un modelo de conservación y colaboración en el Perú.
Emiliano Cacciavillani, un geólogo argentino de Río Cuarto, llegó a Perú en 2016 en busca de nuevas oportunidades laborales. Su llegada fue impulsada por el amor y la admiración por la cultura peruana. "La verdad es que todo inició por una red social, Facebook. Conocí a mi actual señora y, durante dos años, tuve una relación a distancia", comparte Cacciavillani.
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El origen de un sueño verde
El 19 de diciembre de 2021, una llamada de Ricardo Alviño marcó el inicio de un ambicioso proyecto. "Yo tenía un jardín que hoy en día es el primer jardín botánico frente al colegio público en San Martín de Porres y el primero en todo el Perú", recuerda. A pesar de los desafíos del terreno, el equipo ha logrado transformar 3.000 metros cuadrados con más de 160 árboles de 26 especies diferentes.
Avances en la protección del gecko limeño y la revitalización del ecosistema local
Uno de los objetivos principales del proyecto es la preservación del gecko limeño, un reptil nocturno en peligro de extinción. "Hemos logrado crear pequeños sectores de resguardo y alimento para esta especie, y ya hemos visto varias crías de gecko limeño", afirma Cacciavillani con orgullo. La fauna local también ha comenzado a prosperar, con la aparición de diversas aves y mariposas.
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El proceso de plantación es meticuloso. "Comienza con la estabilización del terreno para evitar desprendimientos rocosos. Luego, se hacen los hoyos para las plantas con la pendiente hacia el cerro para mantener la humedad", explica el geólogo. Su experiencia en minería ha sido crucial para superar los obstáculos del terreno.
El poder de la comunidad: uniendo esfuerzos para el éxito del proyecto Cerro La Milla
El éxito del proyecto Cerro La Milla se debe en gran parte a la participación activa de la comunidad. "Hoy en día, gracias a las redes y a todos ustedes que están detrás de las pantallas, esto va en aumento. Tenemos un montón de voluntarios que se han sumado", menciona Cacciavillani. La diversidad de voluntarios refleja el impacto del proyecto, uniendo a personas de diferentes distritos.
Ricardo Alviño destaca la importancia del apoyo comunitario: "El proyecto se inicia gracias al geólogo Emiliano, que es la cabeza de este proyecto". La reacción de la población ha sido positiva, rompiendo barreras físicas y conceptuales, promoviendo un sentido de pertenencia más allá de las divisiones.
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Metas ambiciosas para un ecosistema sostenible
Las metas del proyecto son ambiciosas. "Esperamos que la vida nos alcance para desarrollar este lindo proyecto, que no solo trata de sembrar árboles, sino también de crear un ecosistema sano y virgen en este lugar árido", señala Alviño. Entre los planes futuros se incluye la creación de un destino ecoturístico que atraiga visitantes de Lima y más allá.
A pesar de los desafíos, el proyecto ha atraído la atención de diversas entidades. "Al inicio, contamos con el apoyo del Municipio de San Martín de Porres. Actualmente, no contamos con ese apoyo, pero estamos en conversaciones con entidades privadas y algunas ONG", explica Alviño.
Colaboración comunitaria por un futuro sostenible
El proyecto Cerro La Milla es un testimonio del poder de la colaboración comunitaria y el compromiso con la conservación del medio ambiente. "Hoy día siembro un árbol. Mañana, si muero, ese árbol continuará como un legado para distintas generaciones", concluye Alviño. La esperanza es que este oasis en construcción no solo beneficie a la fauna y flora locales, sino que también inspire a otras comunidades a seguir su ejemplo.
Emiliano Cacciavillani expresa su gratitud hacia Perú: "Para mí, Perú es hermoso, grandioso, la cultura ancestral que tienen ustedes y la preservación de la cultura con el tema de la danza es increíble". Su visión es clara: convertir el cerro La Milla en un ejemplo de resiliencia y sostenibilidad, donde la comunidad y la naturaleza coexistan en armonía.