Migrantes acusan a PNP de cobrarles coimas para darles pase a Perú
En la frontera Perú-Chile la tensión aumenta por el aumento de ciudadanos extranjeros que intentan ingresar al territorio peruano.
Desde hace casi dos semanas, la tensión en la frontera entre Perú y Chile ha aumentado debido a la presencia de migrantes en situación irregular, principalmente de Venezuela y Haití, que intentan cruzar al lado peruano utilizando cualquier medio disponible.
En el paso fronterizo conocido como Línea Concordia y sus alrededores en la vía Panamericana Sur, aproximadamente 50 extranjeros intentan ingresar diariamente, pero la situación se agrava durante las horas nocturnas. Curiosamente, la Policía se retira del lugar por la noche, y en ese momento, el número de migrantes puede superar los 150.
Según información proporcionada por la XIV Macrorregión Policial de Tacna, se han desplegado 180 efectivos policiales de diversas comisarías y unidades especializadas en diferentes puntos fronterizos por donde se presume que los extranjeros ingresan de manera ilegal.
Se han presentado denuncias de corrupción policial, en las cuales ciudadanos extranjeros afirman que algunos agentes les han exigido hasta 50 mil pesos chilenos para permitirles cruzar al lado peruano. Se sospecha que estos agentes están desempeñando el papel de "coyotes" al facilitar el ingreso por pasos no autorizados al país.
Una ciudadana chilena que intentaba cruzar con su hijo sin la autorización del padre denunció que, a pesar de haber entregado dinero a un policía, no lograron pasar la frontera. Además, afirmó que el agente luego intentó aprovecharse de ella ofreciéndole ayuda a cambio de insinuaciones sexuales para cruzar al lado peruano.
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Por otro lado, un ciudadano venezolano informó que algunos policías les han solicitado entre 20 y 100 pesos chilenos para llevarlos a través de la frontera, dependiendo de la disponibilidad de seguridad, especialmente durante la noche. Señaló que su grupo se acercó a los agentes y les ofreció dinero, y algunos de ellos aceptaron el soborno, aunque no todos lograron cruzar con éxito.