Violencia de género no se detiene en el país
Indignante. Antes de que el PJ dictara prisión preventiva para acusados de violar a una joven, un sujeto asesinó a su pareja y luego se suicidó en plena vía pública.
La violencia machista parece ser otra pandemia. Ayer, poco antes de que el Poder Judicial dictara nueve meses de prisión preventiva a los cinco acusados de abusar sexualmente de una joven en Surco, el emporio comercial de Gamarra quedó conmocionado por otro terrible caso de violencia de género: un ciudadano extranjero mató a otra inmigrante y luego se suicidó, delante de varios testigos.
Ante ello, activistas protestaron desde las redes sociales contra una sociedad patriarcal, machista y misógina, que vuelve común la violencia contra la mujer y fomenta la impunidad, y demandaron una mayor acción del Estado.
Y así lo entendió el juez Arturo Zapata Carbajal, quien luego de una ardua diligencia dispuso nueve meses de prisión preventiva para José Arequipeño, Sebastián Zevallos, Diego Arroyo, Andrés Fassardi y Manuel Vela.
La Fiscalía basó su acusación en la entrevista psicológica, certificado médico legal donde se evidencia la existencia de lesiones en la víctima y otros elementos con los que se reconoció a los supuestos agresores.
El ataque sexual se dio a conocer el lunes luego de que una joven de 21 años denunciara el caso en la comisaría de Chacarilla del Estanque.
Feminicidio y suicidio
El otro caso que conmovió ayer ocurrió en pleno corazón de La Victoria. Tras una fuerte discusión, un extranjero de 30 años asesinó a balazos a una joven, también inmigrante, y luego se suicidó, en plena vía pública.
Los familiares de Yolimar Josefina Mosquera Mendoza (30), de nacionalidad venezolana, confirmaron que ella estaba embarazada y que era acosada por Carlos Wilfredo Hernández Rodríguez, el feminicida.
Una patrulla policial acudió al lugar y, aún con signos de vida, los trasladó al hospital Dos de Mayo. El médico Francisco Lombargi Yamana solo confirmó los decesos.
Ocurrió alrededor de las 8:35 de la mañana, en la esquina de Antonio Bazo con Humboldt. La terrible escena fue registrada por una cámara de videovigilancia. Las imágenes muestran cómo peleaban a los gritos mientras caminaban.
Todo terminó cuando Yolimar intentó cruzar la pista corriendo. Carlos Hernández extrajo un revólver y le disparó a quemarropa un tiro en el abdomen. La mujer se desvaneció.
Apenas la vio caer, él se llevó el cañón del arma a la frente y abrió fuego.
“Yo escuché a la joven que gritaba ¡policía, policía! ¡Auxilio, auxilio!, fui y estaba tirada en el piso. A un lado yacía el hombre que la perseguía”, relató a La República el vigilante de un edificio ubicado en el jirón Antonio Bazo.
Madre de un acusado se pronuncia
Rosa Farje, madre de Manuel Vela, dijo que su hijo jamás fue sindicado por la víctima como uno de los agresores. Explicó que el muchacho se retiró del inmueble antes de que ocurriera la violación grupal.
“Él llamó a una amiga para que le enviara un taxi, se sentía mal porque había tomado mucho. Hay un video de las 11 de la noche cuando se ve a mi hijo ingresar a la casa de su amiga, en Surquillo”, explicó. “Si mi hijo cometió una falta que pague por eso, pero él no es un violador”. agregó.