La Rinconada y cómo sobreviven sus habitantes a 5200 metros de altura [FOTOS]
Científicos de Francia, Italia, Israel y Perú investigan cómo sus habitantes se adaptaron a condiciones extremas donde falta el oxígeno. Investigaciones determinaron que tienen niveles de hemoglobina y hematocritos que otros ciudadanos no podrían soportarlos.
Puno. Hace quince años, aproximadamente, se creía que el ser humano no podía vivir de manera permanente por encima de los 5000 metros sobre el nivel del mar (m.s.n.m)
Cincuenta mil habitantes del poblado La Rinconada, en el distrito puneño de Ananea, rompieron ese desafío geográfico y se fueron asentando paulatinamente a más de 5200 m.s.n.m.
El médico puneño Iván Hancco, planteó una investigación para determinar cómo estos hombres, mujeres y niños sobreviven a un ambiente muy hostil donde el oxígeno es muy escaso para nutrir funciones vitales.
Los estudios de Hancco interesaron a científicos franceses del laboratorio de Hipoxia y Patología del Deporte de la Universidad de Grenoble.
En 2017, nació la expedición científica y humanitaria “Expédition 5300” para descubrir el proceso de adaptación de esta población y ayudar a aquellos que padecen enfermedades relacionadas con la falta de oxígeno.
A la investigación también se sumaron científicos de Italia e Israel. El proyecto es financiado por el Instituto Nacional de Salud de Francia y algunas instituciones privadas.
La República entrevistó a Iván Hancco, único representante peruano en la expedición quien dio cuenta de los primeros resultados.
Visitas y resultados
El equipo de investigación visitó La Rinconada en febrero del 2018 y del 2020. Conformaron equipos de Francia para armar un laboratorio provisional en el lugar.
Los profesionales evaluaron a 500 voluntarios. A 100 de ellos les realizaron exámenes y pruebas funcionales para medir la hemoglobina y hematocrito, volumen sanguíneo total, capacidad de transporte de oxígeno en la sangre, lector del mal de montaña crónico, estudios metabólicos, ente otros.
Para esta labor también contaron con el apoyo de estudiantes de Medicina de Puno.
En los primeros resultados se obtuvo que el promedio del hematocrito de la población evaluada total es de 60%. El valor más alto fue de 82%, lo que quiere decir que la sangre es más viscosa.
“Ese valor de hematocritos no es compatible con la vida, pero esas personas viven tranquilas”, explica Iván Hancco. A nivel del mar el promedio es de 46% lo que permite la fluidez de sangre.
Por otro parte, los residentes manejan niveles de hemoglobina que llegan a 20 y 21. Usualmente cuando una persona alcanza 18 sufre dolor de cabeza y dificultad para respirar.
Enfermedades y tratamientos
En buena parte de los evaluados sus mecanismos de compensación y adaptación funcionan correctamente. Sin embargo, los estudios revelaron prevalencia de eritrocitosis excesiva de 44% y mal de montaña crónico de 14% en los voluntarios. Esto significa elevación de hemoglobina y hematocrito en la sangre, en ambos casos. Solo en el mal de montaña se presenta sintomatología, como dificultad para respirar, dolor de cabeza intenso, palpitaciones, zumbidos, etc.
Males como estos pueden desencadenar problemas cardiovasculares, respiratorios y neurológicos e incluso a nivel del sistema nervioso.
Los investigadores prueban con medicamentos que puedan aliviar o mantener un nivel de hemoglobina y hematocritos óptimos, para que la salud de los habitantes no se complique. Ahora hay tres tratamientos con Atorvastatina, Acetazolamida y Placebo. En este caso son 60 voluntarios quienes deberán tomar por ocho meses la medicación. Durante y al final de su consumo se evaluará cuál tiene mejores resultados.
Estudio genético
Los científicos se llevaron muestras para hacer un estudio genético, que les permita explicar la adaptación de la población a esa altitud.
“Las funciones corporales de todos los órganos se manejan gracias a que existen una programación a nivel de los genes. Lo que queremos ver es si existe algún gen que se haya modificado que permita tolerar mucho mejor, por ejemplo, el incremento de hemoglobina en estas personas”, refirió Hancco.
Los avances en la investigación fueron publicados en revistas científicas y fue lo que atrajo el interés de medios de comunicación de Europa.
La siguiente visita estaba programada para agosto de este año. Sin embargo, fue pospuesta debido al estado de emergencia.