Pediatras oncólogos, la gran necesidad en la lucha contra el cáncer infantil en Perú
Pese a que la ley de cáncer infantil otorga múltiples beneficios al menor de edad y su familia para soportar de mejor manera la neoplasia, aún falta mucho para contrarrestar la falta de especialistas en el país.
“No satisfacemos toda la demanda”, señala la doctora Katy Ordoñez, una de las poquísimas pediatras oncólogas que tiene el Perú. Según cifras que manejan en el Instituto Nacional de Enfermedades Neoplásicas (INEN), el número de especialistas en cáncer infantil no superan los 40, contando a los que recién se están formando.
La nueva Ley de cáncer infantil detalla beneficios sustanciales en la mejora de la prevención, diagnósticos y tratamiento de menores de edad con cáncer, pero ha sido muy escueto con la promoción y fortalecimiento de la pediatría oncológica, la especialidad dedicada a los niños con neoplasia.
PUEDES VER Una ley para los niños con cáncer
Déficit de pediatras oncólogos en el Perú
“Internacionalmente se ha recomendado a los países que debe haber en promedio 1 pediatra oncólogo por cada 10 casos nuevos de cáncer infantil, pero en el Perú estamos con 1 por cada 50 casos nuevos”, sentencia Ordoñez, preocupada porque estos números imponen que ellas y sus colegas tengan que realizar máximos esfuerzos para cumplir con todos los casos que cada año llegan al INEN, el instituto especializado de cáncer y que contiene a la mayor cantidad de pediatras oncólogos. En las regiones no hay casi especialistas.
“Damos todo de nosotros, pero tenemos que buscar hacerlo rápido y bien. Estamos acostumbrados a trabajar con la premura de tiempo, sin embargo no es lo ideal. Los pediatras oncólogos nos tenemos que volver “todistas”, ya que tenemos que ver todos los tipos de cáncer infantil. En los países de altos ingresos solo se dedican a una especialidad”, señala la doctora.
La falta de pediatras oncólogos tampoco permite que ellos se puedan dedicar a la investigación, debido a su alta carga de pacientes que les demandan más tiempo de lo normal. En la mayoría de casos no les queda el tiempo adecuado para sus familias.
El doctor Juan García, director de oncología pediátrica en el INEN, señaló que no solo es importante la infraestructura, sino también el profesional que va a atender, porque no es lo mismo que un oncólogo de otra especialidad atienda un caso de cáncer infantil. “No es lo mismo que un niño sea atendido por un oncólogo de adultos, pero eso pasa en el Perú por déficit de especialistas”, indicó a La República.
cancer
Solo tres universidades tienen la especialidad de pediatría oncológica
Actualmente, ninguna universidad peruana enseña pediatría oncológica a nivel de pregrado. Solo tres tienen la especialidad a nivel de postgrado: Universidad Cayetano Heredia, la Universidad Ricardo Palma y la Universidad San Martín de Porres.
Para estudiar esta especialidad, detalla la doctora Katy Ordoñez, primero debes especializarte en pediatría y luego recién podrás llevar, como segunda especialidad, pediatría oncológica. Además, recalca, que la mayoría tiene que salir al extranjero para completar sus estudios, ya que afuera la especialidad es más estudiada y está más desarrollada.
Para García, el problema radica en la falta de vacantes que el Consejo Nacional de Residentado Médico le otorga a la especialidad de pediatría oncológica. Además, detalló que eso también es responsabilidad del Ministerio de Salud, sobre todo para que habilite un mayor presupuesto para cada residente, y de las universidades.
La aprobada Ley de cáncer infantil no detalla de manera muy precisa la importancia de fortalecer la pediatría oncológica, solo menciona “la necesidad de construcción de infraestructura para esta especialidad”, pese a ello, la doctora Ordoñez está segura que en la reglamentación se precisará más apuntes sobre el tema, ya que el problema no acaba con mejorar la atención de los pacientes, si no también en dar una debida atención a los especialistas.
Ley de cáncer infantil
El Congreso de la República acaba de aprobar la Ley de cáncer infantil, una norma que permitirá a los menores de edad obtener un diagnóstico temprano y una atención integral por medio del Seguro Integral de Salud (SIS). A continuación te detallamos todos los beneficios estipulados en la nueva norma:
- Si los menores afectados con cáncer no cuentan con un seguro médico en EsSalud ni seguro privado, serán afiliados de manera inmediata al Seguro Integral de Salud (SIS) con su Documento Nacional de Identidad (DNI).
- Las aseguradas públicas y privadas otorgarán un subsidio económico de dos Remuneraciones Mínimas Vitales al trabajador que tenga un menor de 18 años diagnosticado con cáncer durante el tratamiento hospitalario.
- Se otorgará licencia con goce de haber por un periodo no mayor a un año al trabajador cuyo hijo, niño o adolescente menor de 18 años, sea diagnosticado de cáncer. Además, si cumple los 18 años durante su tratamiento, la cobertura continuará vigente hasta su culminación.
- Finalmente, también se estipula la creación del Registro Nacional de niños y adolescentes con cáncer a nivel nacional y la construcción de infraestructura para los servicios de pediatría en el Instituto Nacional de Enfermedades Neoplásicas (INEN).
cáncer infantil
El cáncer infantil en el Perú
Aproximadamente, 2.000 niños y adolescentes son diagnosticados con cáncer cada año en el Perú. El Ministerio de Salud detalló que, en promedio el 56 % de los casos corresponden a varones y el 44 % en mujeres.
El Minsa también ha informado que el 40 % de casos corresponden a leucemia, el 18 % a tumores del sistema nervioso central, 14 % a linfomas y lo restante a enfermedades como retinoblastoma, tumor de Wilms y sarcomas entre los más importantes.
Otro de los grandes problemas en materia de cáncer infantil en el Perú es el porcentaje de pacientes que abandonan el tratamiento, lo cual aumenta el índice de mortalidad. Según el Minsa, la prevalencia de abandono es de 18,4 %, es decir, uno de cada cinco niños diagnosticados con cáncer no termina el tratamiento por múltiples factores, pese a que, en muchos casos, se tratan de neoplasias curables.