Sociedad

Más de 100 personas varadas en Iquitos viven en la calle mientras esperan regresar a Lima

Loreto es una de las regiones más afectadas por la COVID-19. Poco más de cien compatriotas no pudieron retornar tras la declaratoria de emergencia y esperan ayuda, pues subsisten en las calles.

Piden vuelo humanitario para varados en Iquitos. Foto: Julio Trinio
Piden vuelo humanitario para varados en Iquitos. Foto: Julio Trinio

Aproximadamente 350 personas se encuentran atrapadas en una pesadilla en Iquitos (Loreto), una ciudad envuelta en las horas más duras de la batalla contra la COVID-19, pues ya hay 2.037 personas contagiadas de coronavirus y 92 fallecidos. En ese contexto de temor, ellos no tienen la posibilidad de retornar a sus regiones de origen y piden traslados humanitarios hacia Lima.

Hasta este 13 de mayo, casi dos meses después de declararse el Estado de Emergencia Nacional, 115 de ellos viven en la calle, sobre cartones, frente a la Dirección Regional de Trasportes, en Iquitos. Sin embargo, son días grises, fríos y lluviosos en la capital de la Amazonía peruana, que sufre el colapso del sistema sanitario.

La mayoría de estos hombres y mujeres estaban en Iquitos por cuestiones laborales, que se vieron truncadas, cuando las medidas de aislamiento social se declararon. Los escasos recursos económicos de los que disponían se agotaron en las primeras semanas, al igual que su ilusión de regresar con sus familias.

Ahora, para ellos es imposible costear pasajes de avión a Lima que se anuncian con precios superiores a los 800 dólares, coste aproximado de un vuelo internacional a Europa.

Solidaridad en medio de la crisis

Este grupo sobrevive gracias a la solidaridad de vecinos del lugar, que se compadecen de su precario estado y les entregan cartones, plásticos y alimentos.

Ellos son personas, compatriotas con nombre y apellido. Está Mariana Lozano, en avanzado estado de gestación, dejó a su familia en Cusco para estar en Loreto durante una semana. Su marido la espera con el corazón destrozado, temiendo que pueda sucederla cualquier desgracia, lejos de su familia y los cuidados necesarios por su estado. Indica que no ha recibido ninguna atención médica en estos dos meses, a pesar de que su parto está programado para el 24 de mayo.

El señor Vicente Cornejo llegó a Iquitos para unos días de turismo. Cuando el presidente anunció los vuelos humanitarios se trasladó a la ciudad para subirse en uno, pero ahora vive en la calle.

La señora Charo, con su mamá, su hermana y un hijito de dos años, ve pasar los días a las puertas del Ministerio de Transporte durante estas ocho semanas. Las autoridades locales no les brindan alternativas de una acogida humanitaria y digna.

Norma Choto González y su hijo de 11 años, Víctor Bardales Pinedo con su esposa enferma de cáncer en Lima, Celia Inuma de 59 años, enferma de diabetes y con su esposo minusválido en Lima, Rosana Lunareto López, operada de un aneurisma recientemente, sin pastillas con las que tratarse las convulsiones, Junior Sevillano Rengifo, Norberto Curico Ahuanari. Todos ellos sufren en las calles y siguen esperando.

Están sin trabajo, sin dinero, sin conocidos en la ciudad que les puedan apoyar, las instituciones públicas miran hacia otro lado, mientras ellos padecen.

Comunicarse aquí para ayuda:

Pilar Romo: 977 560 558

Con información de Julio Trinio, en Iquitos