Pueblos indígenas y originarios cumplen rol importante en estabilidad climática global
Un reciente estudio advierte la vulneración de sus derechos, debido a la falta de diversas políticas públicas.
Un reciente estudio resaltó el importante papel que cumplen los pueblos indígenas y originarios en el cuidado de la selva amazónica, cuyos bosques en la actualidad contienen 73 mil millones de toneladas de carbono.
El último 27 de enero, la revista Proceedings of the National Academy of Sciences señaló que los territorios indígenas, así como áreas protegidas, experimentan menores pérdidas de carbono a lo largo de los años porque tienen tasas más bajas de deforestación y degradación forestal. Esto, según explicaron los científicos, contribuye de forma directa a regular el clima y así evitar que el calentamiento de la Tierra sea más intenso.
“(...) su papel es crucial y debe fortalecerse para que los países de la cuenca amazónica logren mantener este recurso globalmente importante, al mismo tiempo que cumplen sus compromisos bajo el Acuerdo Climático de París”, expresó Wayne Walker, quien es científico del Centro de Investigación Woods Hole (WHRC) y autor principal del artículo.
Por medio de imágenes satelitales y mediciones de campo se analizaron las pérdidas y ganancias de biomasa entre el 2003 y 2006 en la región Amazónica. Las mayores pérdidas tuvieron lugar en territorios que no tenían ningún nivel de protección.
En el caso peruano, durante el periodo estudiado, se han perdido 26.4 millones de toneladas de carbono (MTC). No obstante, los pobladores de tierras indígenas y de áreas naturales protegidas actuaron como sumidero neto de carbono gracias al papel que tienen como defensores de la selva contra la deforestación.
Sin embargo, a pesar de ello la falta de políticas destinadas a preservar los recursos naturales y en contra de la expansión de actividades extractivas genera que el escenario aún sea negativo.
“Desafortunadamente, los pueblos indígenas, que manejan y conservan mejor los bosques gracias a sus prácticas ancestrales, son los primeros afectados por la pérdida del bosque y el aumento de las emisiones de carbono, ya que los eventos climáticos afectan los recursos que son fundamentales para su calidad de vida’’, señaló por su lado Sandra Ríos, especialista del Instituto del Bien Común en Perú.
Comunidades nativas como Kakataibo, ubicada en la selva central del Perú, se ven afectadas por la tala ilegal, lo que provoca degradación forestal, además de luego dar lugar a la deforestación por la expansión de la ganadería, cultivo ilegal de coca y agricultura.