La calidad de los colegios privados bajo la lupa

En Lima Metropolitana, tres de cada cuatro colegios son particulares, lo que significa que atienden a un universo de 900 mil estudiantes. Por ello, dado que se han detectado deficiencias alarmantes, asegurar la calidad del servicio educativo es una obligación impostergable.

Hace unos días, el Ministerio de Educación (Minedu) publicó un decreto que establece medidas para la lucha contra la informalidad en la educación básica privada. Se espera que, en virtud de esa norma, se cierren por lo menos 264 colegios ilegales (sin autorización para operar).

Por otro lado, existen unos 1.315 colegios particulares que, pese a tener autorización, brindan un servicio de un nivel no permitido o en locales distintos a los registrados. Dichas instituciones, que atienden más de 40 mil alumnos, también estarán en la mira de las autoridades.

“Algunos colegios amplían sus servicios educativos a otro local dentro de su jurisdicción. Ellos tienen la resolución más no la autorización. El otro problema es que algunas escuelas ofrecen un nivel educativo no autorizado, por ejemplo, un colegio enseñaba las áreas inicial y primaria, abre aulas para secundaria sin ninguna autorización”, explicó Edgardo Palomino Huamanchumo, de la Asociación de Colegios Privados de Lima (Acopril).

El vocero de Acopril indicó la norma aludida permitirá que esos colegios privados, bajo supervisión del Minedu, puedan subsanar sus faltas. Si optan por la formalización, se deberán adaptar a los requerimientos del Minedu. En caso no cumplan con esos estándares, se procederá con el cierre y la aplicación de una multa.

No hay fiscalización

Alfredo Velásquez, representante del Sindicato Unitario de Trabajadores en la Educación del Perú (Sutep), manifestó que el servicio educativo, al ser un derecho fundamental, se debe brindar en espacios dignos, con procesos de aprendizaje diseñados en función de las necesidades de los alumnos. Sin embargo, la fiscalización es deficiente.

“Esto no ha sido posible con la labor de las Ugeles, las Direcciones Regionales de Educación. Tampoco con el Indecopi. Los colegios no tienen ningún tipo de control”, manifestó el representante del gremio docente.

Según Velásquez, resulta necesaria la creación de un organismo similar a Sunedu para las escuelas privadas.

El dirigente explicó que la enseñanza que se brinda en las escuelas particulares de las periferias de las ciudades no garantiza los objetivos del Minedu.

"La informalidad es muy alta y el perjuicio no solo es para los estudiantes sino también para los docentes, a quienes se les paga 500 soles y a quienes no les ofrecen beneficios laborales, como vacaciones, seguro o aguinaldos", refirió.

Según el vocero del Sutep, los promotores pueden abrir colegios con mucha facilidad gracias al Decreto Legislativo 882, dictado durante el régimen de Alberto Fujimori, quien permitió el lucro en la educación.

Servicio en evaluación. En Lima existen miles de instituciones educativas privadas, que serán supervisadas para garantizar que cumplen con los estándares del Minedu.

Las cifras

76% de las escuelas en Lima son privadas (de un total de 7.700).

49% de la matrícula a nivel de Lima se realiza en colegios privados.