Sociedad

El papa eliminó secreto pontificio para denuncias de violación: los casos de pederastia en Perú

Los escándalos de pederastia han sacudido a la Iglesia Católica alrededor del mundo. En el Perú casos como los del Sodalicio, el sacerdote Francesco Mambretti y el cura padre Félix Pariona son tan solo algunos de los muchos que existen.

La medida fue anunciada este martes 17 de diciembre. (Foto: EFE)
La medida fue anunciada este martes 17 de diciembre. (Foto: EFE)

Este martes, el papa Francisco ordenó eliminar el secreto pontificio en los casos de abuso sexual a menores por parte de miembros del clero. A esta decisión histórica también se le suma la ampliación de edad límite en la que el Vaticano considera que las imágenes pornográficas constituyen pornografía infantil. Antes era 14 y ahora será 18 años.

En el 2001, el papa Benedicto XVI decretó que los casos de abusos sexuales cometidos por sacerdotes, obispos o cardenales debían gestionarse bajo secreto pontificio, que es el grado más alto de confidencialidad en la iglesia. No obstante, esta medida también sirvió para que el hecho se mantenga oculto, lo que incluía silenciar a las víctimas.

Los testimonios de miles de personas que han contado el calvario al que fueron sometidas, cuando eran niñas y adolescentes, se han registrado en todo el mundo, incluyendo nuestro país.

Entre los casos más sonados en el Perú está el del Sodalicio, un grupo religioso de laicos con votos religiosos que fue fundado en 1971. Varios de los miembros de la organización han sido denunciados por abusos psicológicos, físicos, así como sexuales contra menores de edad.

En el 2015 se publicó el libro ‘Mitad monjes, mitad soldados’, de Pedro Salinas, en el que se reunieron 30 testimonios de supuestos abusos cometidos durante cerca de 30 años. Tras el lanzamiento, otros jóvenes contaron sus casos a la prensa. Las víctimas señalaron como autores de los delitos al fundador del movimiento del Sodalicio, Luis Fernando Figari Rodrigo, y a Jeffrey Daniels, entre otros.

Otro caso, que se publicó en La República en abril del 2019, fue sobre el sacerdote Marco Francesco Mambretti. A él lo acusaba un menor, de iniciales G.T.R., de abuso sexual. La víctima, quien sufre de un retardo mental leve, lo describió y señaló como su agresor sexual. Sin embargo, en vez de recibir apoyo por parte de la iglesia, el Monseñor Gaetano Galbusera demandó a los feligreses firmar un manifiesto de adhesión a favor del sacerdote.

Asimismo, en mayo del 2018 se conoció el caso del cura Félix Pariona Huacre por medio del exseminarista Gilberto Huamán Yuca. Este último admitió que el párroco lo obligó a declarar a su favor ante el Ministerio Público en la denuncia de abuso sexual contra una menor.

La violación habría tenido lugar dentro de las instalaciones del Seminario San Cristóbal de Huamanga. Huamán dijo que aceptó el pedido de silencio por miedo y que a cambio le ofrecieron un trabajo bien remunerado y una vivienda estable.

‘‘Le tenía miedo al padre Félix Pariona, yo no sé de lo que es capaz de hacer (...). Y porque también empezó conmigo, si yo fuese mujer hace tiempo me hubiera violado. La verdad nos hará libres’’, dijo Gilberto Huamán a La República en aquel entonces.

La nueva medida anunciada por el papa Francisco entrará en vigor de manera inmediata. En el 2018, la teóloga Margarita Pintos de Cea-Naharro, presidenta de la Asociación para el Diálogo Interreligioso de Madrid (ADIM), fue consultada sobre el tema por el diario El País.

‘‘Somos ciudadanos, por lo tanto, debemos cumplir con las leyes civiles, aunque entren en contradicción con nuestro código de creencias. En ningún caso hay que ocultar un delito bajo la excusa del secreto de confesión”, indicó.