Así inició la escucha de bochornosos audios que ponen al descubierto negociaciones ilícitas entre miembros del CNM y el Poder Judicial.,Misterio resuelto. Tras la difusión de las escuchas telefónicas legales que involucran a altos cargos del Consejo Nacional de la Magistratura, el Poder Judicial y hasta “la Señora k”, más de uno ha querido conocer la procedencia de dichas conversaciones. Fue por ello que los periodistas Gustavo Gorriti y Rosana Cueva fueron citados a fin de brindar información de sus fuentes y material restante. Sin embargo, ambos coincidieron en que esta citación solo buscaba amedrentarlos y quebrnatar el derecho de reserva de fuentes periodísticas por lo que no se presentaron. PUEDES VER Abogado con sordera denuncia discriminación de miembros del CNM Sin embargo, todo inició con el seguimiento a una de las mafias narcotraficantes que operaba en el Callao. Era 2015 cuando un grupo de investigadores de la Policía Nacional iniciaría un operativo cuyo centro era dar con el paradero de Gerson Gálvez Calle alias “Caracol”. Fue por esa razón que solicitó un permiso para escuchar las llamadas telefónicas, las mismas que fueron autorizadas por el Poder Judicial. Pero no fue hasta julio del año pasado que la titular de la Fiscalía Provincial Especializada Contra la Criminalidad Organizada del Callao daría luz verde para identificar una nueva red que operaba bajo el nombre “Los Castañuelas de Rich Port”. Entonces empezaron a llamar a una gran lista de números telefónicos cuyos interlocutores eran desconocidos. Amparados en el permiso legal. Los agentes de la Dirandro enviaron un primer informe que cambiaría la imagen de determinados representantes de la justicia peruana. Finalmente, a través de un comunicado el juez Cerapio Roque refirió que las escuchas telefónicas fueron legales y que al interceptar las llamadas se desconocía que los personajes en el teléfono eran miembros del Consejo Nacional de Magistratura y el Poder Judicial.