Política

Fujimorismo consiguió ilegal indulto con influencia política

Cálculo e impunidad. Los hermanos Fujimori y sus políticos lograron usar su poder para beneficiar a su padre tras negociaciones con Pedro Pablo Kuczynski y elección de aliados en el TC, pese a graves delitos con condena.

Celebración. Kenji, Alberto y Keiko ostentaron el logro de excarcelación, aunque queda pendiente pronunciamiento de la justicia internacional y casos en el Poder Judicial peruano. Foto: Kenji Fujimori
Celebración. Kenji, Alberto y Keiko ostentaron el logro de excarcelación, aunque queda pendiente pronunciamiento de la justicia internacional y casos en el Poder Judicial peruano. Foto: Kenji Fujimori

El fujimorismo consiguió el ilegal indulto a su líder histórico, Alberto Fujimori, con su influencia política en un sendero en que fueron claves su peso en el Congreso y tratos para colocar aliados en el Tribunal Constitucional (TC).

A fines del 2017, el entonces presidente Pedro Pablo Kuczynski dio el indulto, sin cumplir condiciones legales, tras salvarse de la vacancia por los votos de Kenji Fujimori, hijo del exdictador, en ese momento congresista, y su facción en el Parlamento. Los llamados ‘mamaniaudios’ evidenciaron cubiliteo del indulto por los votos.

Hubo allí un choque entre los hermanos Keiko y Kenji Fujimori. Ella apuntaba a la cabeza de Kuczynski, él quiso aprovecharlo para excarcelar al padre.

 Poder. Fujimoristas pusieron a magistrados del TC que han favorecido a su líder. Foto: difusión

Poder. Fujimoristas pusieron a magistrados del TC que han favorecido a su líder. Foto: difusión

En octubre del 2018 y febrero del 2019, la Corte Suprema del Poder Judicial anuló el indulto por graves falencias: Fujimori tuvo a su médico en un proceso exprés con varias inconsistencias. El exdictador regresó al penal a cumplir su condena.

Sin embargo, quedaba un as bajo la manga. En las campañas electorales, Keiko aducía que apostaba por el recurso judicial del habeas corpus para liberar a su padre. Al tener peso en el Congreso, pudo poner aliados en el TC, donde llegan los habeas corpus que niega el PJ.

En abril del 2022, el TC concedió el habeas corpus que revivió el cuestionado indulto. Lo hizo con votos de los entonces magistrados Ernesto Blume, Augusto Ferrero y José Sardón.

Blume, que fue el ponente, fue elegido con votos en bloque del fujimorismo el 2014. Antes fue abogado de Alex Kouri, aliado de los naranjas y tuvo en su equipo a la hija del exjuez César Hinostroza, cabecilla de ‘Los Cuellos Blancos’.

Ferrero fue designado magistrado del TC por propuesta y votación del fujimorismo. Llegó por recomendación del cardenal Juan Luis Cipriani, afin al fujimorismo, según fuentes cercanas al proceso, con quien estudió en el colegio.

Sardón también fue elegido con respaldo de los fujimoristas. Su cuñado fue reclutador de falsos aportantes de Keiko Fujimori, según se supo luego.

El mes pasado, el actual TC ratificó ese fallo con votos de los magistrados Francisco Morales Saravia, brazo de derecho del exlegislador fujimorista Carlos Mesía; Luz Pacheco, supernumeraria del Opus Dei, grupo de Cipriani afin al fujimorismo; y Gustavo Gutiérrez Ticse, exabogado de Renovación Popular y cercano a La Resistencia, colectivo agresivo de ultraderecha.

En el 2022, la mandataria Dina Boluarte, entonces vicepresidenta, se opuso a una liberación de Fujimori que había dispuesto el TC. También lo hizo el primer ministro Alberto Otárola, fuera del Gobierno .

Ahora, ambos viraron para mantener respaldo en el Congreso, según fuentes del Ejecutivo. La salida de Keiko y Kenji a recoger a su padre fue el gesto que abonó convicción: debían saldar esa cuenta pendiente.

Todavía hay casos pendientes

La Sala Constitucional y Social de la Corte Suprema de Justicia ordenó que el proceso judicial por esterilizaciones forzadas en el gobierno de Alberto Fujimori regrese a la etapa de octubre del 2018: presentación de la denuncia de la Fiscalía contra los responsables. Lo hizo por una demanda de amparo del congresista Alberto Aguinaga.

En noviembre del 2022, Kenji Fujimori fue condenado a 4 años y 6 meses de cárcel, con ejecución de pena suspendida, por compra de votos para evitar que vaquen a Pedro Pablo Kuczynski.