Puno da tregua a Pedro Castillo hasta mayo
Respuesta. El altiplano que fue cuna electoral del mandatario. Dirigentes que lo apoyaron en elecciones ahora exigen solución a conflictos y si no frena la crisis política pedirán su renuncia y cierre de Congreso.
Pedro Castillo logró el 89% de votos en la región Puno en las elecciones de segunda vuelta. En medio de la actual crisis política, los gremios que lo respaldaron, advierten ahora que si no encamina soluciones a varios conflictos se sumarán al pedido de su renuncia y cierre del Congreso. Qué se vayan todos.
El mandatario lo sabe y frente a ello hizo un mea culpa en su reciente visita al altiplano. Puno apoyó a Castillo en las elecciones. Organizaciones de bases le dieron respaldo a cambio que se atienda las principales demandas.
A nueve meses de gobierno, la solución a varios pedidos siguen sin atenderse . Crece el desencanto contra Pedro Castillo. El ultimátum para el mandatario sería el 25 de mayo. Ese día se desarrollará una reunión macrorregional para evaluar la gestión de Castillo. Si la calificación política es negativa pedirán el cierre del Congreso y su renuncia a la presidencia.
El presidente del Comité de Lucha de la Cuenca del Coata, Félix Suasaca, dijo que el país es un caos y todos trabajan por sus intereses personales o de grupo. ”Acá sino se ponen de acuerdo por el país pediremos que se vayan todos. Este gobierno no atiende las demandas de las regiones porque hay un congreso que obstruye. Así como se le apoyó ahora decidiremos si se queda o se va”, dijo.
Por su parte, el presidente del Frente de Organizaciones Populares (Fop), Amador Núñez, dijo que el presidente aún tiene plazo para reivindicarse, de lo contrario serán los pueblos que lo apoyaron los que demanden su salida.
“Hasta ahora ningún conflicto social fue solucionado en Puno. Se comprometió por el cambio de la Constitución y no cumplió. El presidente Castillo tiene plazo hasta el 25 de mayo para encaminar sus compromisos. De lo contrario, será la ciudadanía la que salga a ponerle un alto. Para nosotros la salida es un cambio de la Constitución, sino un paro indefinido”, advirtió.
Juan Cari, dirigente del comité de lucha de la zona sur de Puno con base Acora, indicó que si bien apoyaron a Castillo no fue porque son partidarios de Perú Libre sino porque pensaron que la cosas iban a cambiar por el bien del país, mirando a las regiones.
“No puede ser que el gobierno esté enfrascado en sus propios errores. Debe tener mayor reflejo político. Sabemos que la derecha lo está jaqueando. Pero los peruanos no podemos ser espectadores pasivos. Si no actúa cumpliendo sus compromiso lo sentiremos mucho y pediremos que Castillo que se vaya junto al Congreso. Demandamos una nueva Constitución con nuevas reglas de juego”, dijo.
Desde Melgar, los afectados de la cuenca de Llallimayo, también se pronunciaron. José Flores, dirigente aseguró que se están cansando de constantes enfrentamientos entre la clase política del país.
“Nosotros lo hemos elegido a Castillo, pero no responde. No vemos que haya hecho reformas y los paganos somos nosotros que seguimos viviendo en medio de la contaminación. Hemos votado por él pero si no vemos soluciones concretas así como lo hemos elegido tendremos que pedirles que se vayan todos, incluido los congresistas. Puno no se va quedar callado”, dijo.
En la cuenca del Coata, la población consume agua contaminada por las aguas servidasde Juliaca. Se instaló siete reuniones técnicas sin solución. Los afectados piden atención médica para quienes viven con metales pesados y cese de la contaminación.
Hay varios pedidos pendientes. En la ciudad de Puno, los gremios exigen solución a su demanda de doble vía entre Puno-Desaguadero y la construcción de las plantas de tratamiento de aguas servidas para mitigar la contaminación del Titicaca.
En la zona aimara del sur demandan la provincialización del distrito de Acora. Juan Cari, dirigente del comité de lucha de la zona sur de Puno con base Acora.
PUEDES VER: Puno: trabajadores de UGEL San Román son grabados en celebración violando normas sanitarias
Solución depende del gobierno
Llallimayo (Melgar) y Coata (Puno) son dos de los conflictos ambientales latentes más importantes que se activarán si no hay solución, advirtió la Defensoría del Pueblo.
En Llallimayo exigen proyectos de remediación por la contaminación de sus cultivos, mientras que en el segundo caso, demandan proyectos de agua y desagüe rural y agua potable para que los comuneros no sigan consumiendo agua de río contaminado con coliformes fecales.
Jacinto Ticona, jefe de la oficina defensorial de Puno, señaló que ambos problemas dependen de decisiones ministeriales. En la medida que se aplacen los acuerdos y compromisos pactados se podría desencadenar nuevas acciones de protesta. El problema data hace diez y quince años, respectivamente.