Gobernador de Cusco con promesas y megaproyectos trabados

José Víctor Salcedo

El gobernador del Cusco, Jean Paul Benavente García, no pudo hacer magia en su primer año de gestión. Los problemas regionales siguen latentes y los megaproyectos aún trabados y con poco avance.

A manera de justificación, Benavente sostuvo que este año ordenó la cartera de proyectos dejados por sus antecesores. Luego comenzará con otras obras en la región.

El secretario general de la FDTC, Leonardo Chile Letona, cuestionó que no haya concluido las obras emblemáticas y tampoco nuevas inversiones para generar empleo. “Ha pasado un año de gestión y no hay avances. Hay incapacidad”, anotó.

1| El sueño del gas

Cuando estuvo en campaña y el día que juró al cargo, en una demostración de exceso de entusiasmo, Benavente prometió gas domiciliario proveniente de Camisea en seis meses. La promesa continúa en pie.

En febrero pasado, Benavente consiguió firmar un convenio con el Consorcio Camisea para impulsar el proyecto de Gas Natural Vehicular (GNV). En diciembre debía haberse instalado dos gasocentros para distribuir el combustible a taxis en la ciudad. La semana pasada, Benavente develó la primera piedra para instalar el primer gasocentro en el distrito de San Jerónimo. Recién entrará en funcionamiento en febrero de 2020.

2| Hospital Lorena

La gestión de Benavente también había prometido destrabar y reiniciar la construcción del hospital Antonio Lorena, abandonado desde marzo de 2015. Aquel año, el exgobernador actualmente preso Edwin Licona resolvió el contrato con la empresa OAS.

En todo este tiempo, el gobernador intentó retomar las obras sin éxito. Quisieron hacer una licitación con ayuda del Ministerio de Salud, pero al final acordaron convocar a un proceso de Estado a Estado para que un gobierno se haga cargo de la licitación.

Días atrás sólo el gobierno francés presentó su propuesta, que ha empezado a ser evaluada. Si todo marcha bien, recién el próximo año podría realizarse la licitación para concluir el saldo de obra, equipar y capacitar al personal. Benavente dijo que piensa entregar el hospital operativo en el 2021.

Mientras tanto, el hospital Contingencia hace literalmente agua debido a que su vida útil venció hace cuatro años. Este nosocomio sólo debió funcionar dos años, pero ya van siete. Hace una semana se inundó a causa de las lluvias intensas que soporta el Cusco.

El exconsejero regional Alaín Alanoca consideró que “las propuestas que realizó como candidato no las está logrando concretar”. “En la ejecución de proyectos emblemáticos como hospital Lorena, lo único que se conoce es que se ejecutaría bajo la modalidad de Estado a Estado, sin conocerse ni un cronograma ni los hitos que determinarían su ejecución”, evaluó.

3| Vía Expresa

La Vía Expresa es otra promesa todavía incumplida. En abril pasado, Benavente, junto al director ejecutivo del Plan Copesco, José Luis Farfán, anunciaron que habían logrado la aprobación del expediente técnico y con ello salvado el proyecto. Y es que el convenio de préstamo del Banco Mundial vencía en junio pasado y debía tener saneados los documentos y el trazo de la vía. En las últimas semanas tres empresas entregaron sus propuestas económicas para concursar por la obra, avaluada en más de 300 millones de soles. No obstante, el jueves la Contraloría alertó que el Plan Copesco habría impedido la participación de un consorcio, pese a que hay evidencia de que cumplió con entregar su propuesta en los plazos fijados. Contraloría recomendó incluir a esta empresa en el proceso. Copesco informó que comunicaron del incidente al Banco Mundial, que tendrá que emitir una opinión. Este martes darán una rueda de prensa para “comunicar la decisión tomada en aras a la transparencia”.

Así, al cabo de un año, el gobernador cusqueño no concretó ninguna de sus promesas de campaña.

Hay expectativas en el 2020, habrá empleo

Jean Paul Benavente García

Gobernador

¿Cuáles son los logros de este primer año de gestión?

Haber recuperado la confianza de la población. También hay logros en calidad de gestión y calidad de gasto. Hemos conseguido ordenar nuestra cartera de inversiones y destrabar proyectos emblemáticos.

¿Qué faltó para concretar las grandes obras este año?

Este año hubo proyectos totalmente enredados, que necesitaban de un trabajo de gestión. La Vía Expresa era un proyecto en rojo para el Banco Mundial y la hemos destrabado. Ni siquiera estaba incluida dentro del banco de proyectos de inversión, a pesar de que tenía la factibilidad desde el 2017. Hemos logrado incorporarla y ratificar el préstamo.

¿Y el hospital Antonio Lorena?

También. Hemos tenido que dejar nula una resolución que había aprobado el expediente técnico que estaba mal hecho. En los primeros seis meses, tuvimos que sanear todo lo existente y disponible. Hoy estamos en un proceso de Gobierno a Gobierno para hacer la obra.

¿El GNV debía estar en diciembre y nada?

Allí también se necesitaban permisos ambientales y otros que demoran. Se tenía que trabajar seriamente para empezar a traer el gas. Una primera molécula de gas en Cusco abrirá las puertas a la masificación. Lógicamente, como gobierno regional, estamos en la línea de exigir el gasoducto para el sur, pero en paralelo debemos fomentar la cultura del gas.

¿Cuánto avanzó la reestructuración de la Región?

Nada de esto se podría continuar si no se hubiera empezado a reestructurar el Gobierno Regional de Cusco. Por la forma y estructura organizativa y los procesos, el gasto es regular. Hay procesos que estamos cambiando y simplificando en lo administrativo.

¿Diría que su optimismo de inicio de gestión chocó contra ese muro de la burocracia?

Así es. Quieres cambiar algo que está enquistado, que está en las raíces, y lo que debes hacer es comprometer a la gente con los objetivos de la gestión. Hoy ya tenemos ese compromiso. El año 2020 se viene con mucha expectativa desde nuestra mirada. Con cuatro proyectos, que son el Antonio Lorena, Vía Expresa, 2 000 kilómetros de mantenimiento de vías y Chinchero, habrá empleo. Además, se mejorará el servicio educativo y bajará la desnutrición. Se viene un año promisorio, pero nada de eso hubiera sido posible si este año no hubiéramos ordenado todo.