Italia renueva sus métodos de cálculo y revisa datos de crecimiento, deuda y déficit
Italia actualiza sus datos económicos, reduciendo el déficit de 2023 al 7,2% del PIB y la deuda pública al 134,6%, aunque permanece como la más alta de la UE, tras Grecia.
Italia revisó sus últimos datos de crecimiento, deuda y déficit, debido a un nuevo método de cálculo, indicó el lunes el Instituto italiano de Estadísticas, Istat.
El déficit registrado en 2023 fue revisado a la baja, en un 7,2% del Producto Interior Bruto (PIB), frente al 7,4% estimado en abril. En 2022, el déficit se redujo al 8,1%, frente al 8,6% indicado antes. Este año, Roma cuenta bajar el déficit al 4,3% del PIB.
El ratio de deuda pública se rebajó para 2023, pasando del 137,3% al 134,6% del PIB. Esta tasa sigue siendo no obstante la más elevada de la Unión Europea, por detrás de Grecia.
El crecimiento económico en Italia también fue revisado a la baja por el Istat para 2023, en 0,7% frente al 0,9% anterior.
Para 2022 y 2021, en cambio, el crecimiento se ajustó al alza, respectivamente en 4,7% y 8,9%.
Estos anuncios forman parte de una serie de revisiones de las tasas de crecimiento y deuda de Italia de 1995 a 2023.
Estas cifras eran muy esperadas por el gobierno de Giorgia Meloni, ya que al reajustar al alza las tasas de crecimiento de 2021 y 2022, el Istat contribuye a disminuir la ratio de deuda pública con respecto al PIB.
El gobierno de Meloni busca obtener margen de maniobra para los presupuestos de 2025, que no logra cerrar a falta de recursos.
Este presupuesto se anuncia muy ajustado, con la coalición de derecha y de extrema derecha buscando financiar varias de sus promesas electorales, incluida una bajada de impuestos para los ingresos modestos y medidas para relanzar la natalidad.
Estas revisiones del PIB tendrán un impacto en el presupuesto, así como en el plan de enderezamiento de las cuentas públicas que el gobierno italiano debe presentar próximamente a Bruselas.