Mundo

Ortega continúa persecución contra Iglesia católica: detienen 2 sacerdotes y 2 colaboradoras laicas

Estas detenciones han sido interpretadas como un intento del Gobierno de Nicaragua por debilitar aún más a la Iglesia, que ha sido una voz crítica desde las protestas antigubernamentales de 2018.

Existen activistas opositores y periodistas nicaragüenses en el exilio que denuncian al Gobierno de Nicaragua. Foto: Alfredo Zúñiga
Existen activistas opositores y periodistas nicaragüenses en el exilio que denuncian al Gobierno de Nicaragua. Foto: Alfredo Zúñiga

En Nicaragua, la persecución contra la Iglesia católica parece no tener fin. En las últimas horas de este domingo 11 de agosto, dos sacerdotes y dos colaboradoras laicas fueron detenidas, según informaron activistas opositores y periodistas nicaragüenses en el exilio.

Este nuevo episodio de represión se enmarca en la constante arremetida del gobierno de Daniel Ortega contra la Iglesia, una institución que ha sido uno de los pocos bastiones de resistencia frente al régimen.

Daniel Ortega continúa la persecución contra la Iglesia católica

Martha Patricia Molina, abogada e investigadora de temas relacionados con la Iglesia, actualmente exiliada en Estados Unidos, confirmó a través de la red social X que uno de los sacerdotes detenidos es Denis Martínez, perteneciente a la diócesis de Matagalpa, en el norte de Nicaragua. De acuerdo con Molina, Martínez fue arrestado por la Policía Nacional "mientras se dirigía a celebrar misa".

Además de Martínez, los medios digitales nicaragüenses Confidencial y La Prensa, que operan desde el exilio en Costa Rica y Estados Unidos, informaron sobre la captura de otro sacerdote y dos laicas. El segundo sacerdote arrestado fue identificado como Leonel Balmaceda, quien oficiaba en la parroquia Jesús de Caridad en el municipio de La Trinidad, en Estelí, también en la región norte del país. Junto a él, fueron detenidas Carmen Sáenz y Lesbia Gutiérrez, ambas colaboradoras laicas de la Diócesis de Matagalpa.

El abogado Yader Morazán, exiliado en Estados Unidos, utilizó su cuenta en X para revelar más detalles sobre las detenidas laicas. De acuerdo con Morazán, Gutiérrez es "administradora de Cáritas", una organización de caridad vinculada a la Iglesia católica, mientras que Sáenz es "asesora legal de Derecho Canónico y exfuncionaria del Poder Judicial".

El Gobierno de Nicaragua contra la Iglesia católica

El Gobierno de Nicaragua, como en otras ocasiones, ha guardado silencio sobre estos arrestos. Sin embargo, el patrón de represión contra la Iglesia católica es innegable.

Hace poco más de una semana, el Colectivo Nicaragua Nunca Más denunció que trece religiosos fueron detenidos o puestos bajo arresto domiciliario en Matagalpa. De estos, siete fueron expulsados al Vaticano el pasado miércoles 7 de agosto, en lo que parece ser parte de una estrategia para silenciar a las voces disidentes dentro del clero.

¿Por qué Ortega toma estas medidas contra la Iglesia católica en Nicaragua?

La hostilidad del gobierno de Ortega hacia la Iglesia no es nueva. Tanto él como su esposa, la vicepresidenta Rosario Murillo, han acusado a la Iglesia de apoyar las protestas de 2018, que según cifras de la ONU, dejaron más de 300 muertos.

Estas protestas, que el régimen califica como un intento de golpe de Estado patrocinado por Estados Unidos, han sido la excusa para la persecución sistemática de religiosos. Murillo ha llegado a calificar a los clérigos de "hijos del demonio" y "agentes del mal" que practican "terrorismo espiritual".

Este contexto ha llevado a que decenas de religiosos —incluidos obispos como monseñor Rolando Álvarez de Matagalpa— hayan sido detenidos y, en muchos casos, forzados al exilio en el Vaticano.

La comunidad internacional, incluida la ONU, ha denunciado los ataques sistemáticos contra la Iglesia católica y otras confesiones cristianas en Nicaragua, así como también ha señalado que estos actos violan gravemente los derechos humanos y la libertad religiosa.