Wallace Souza: el periodista acusado de mandar a asesinar para dar la primicia y ganar audiencia
El presentador de televisión brasileño fue acusado de mandar a asesinar, al menos, a 5 personas con el fin de transmitir la noticia en su programa y ganar a sus competidores en audiencia. Esta es su historia.
- Peruanos son contratados en España como choferes ante creciente demanda: “En Perú ganaba S/3.000. Aquí recibo entre 2.000 y 2.500 euros”
- El país de América Latina con la peor de esperanza de vida de la OCDE, según ranking: no es Colombia ni Chile
Wallace Souza consiguió ser uno de los presentadores más populares de la televisión brasileña debido a sus exclusivas y sensacionalismo, convirtiendo a su programa, "Canal livre", en uno de los más exitosos del país en la década de los 90.
Sin embargo, su fama escondía una historia macabra. Fue acusado de mandar a matar, al menos, a cinco personas para conseguir la exclusiva de sus muertes en Manaos.
Su caso, incluso, llegó a las pantallas con el documental "La muerte vende" de la mano de Netflix, compuesto por un total de seis episodios.
VIDEO: tráiler oficial del documental "La muerte vende" en Netflix
Balas por rating: el caso de Wallace Souza
Según detalló el diario español El País, Wallace Souza solía presentarse cerca del lugar donde se perpetrarían los homicidios para recibir una llamada telefónica que confirmara el hecho.
Tras esto, su equipo de TV arribaba al sitio del crimen antes que la Policía y la competencia, obteniendo la primicia que le valdría los puntos de rating.
En una columna de Juan Jesús Aznárez en 2009, se contó el caso del asesinato de un proxeneta en septiembre del 2008. Cuando el cuerpo yacía sobre el suelo, apareció el equipo de "Canal livre".
Souza se mostró al lado del cadáver y, micrófono en mano, se tapaba la nariz con la punta de la camisa para acentuar el dramatismo. "Esto está claro: se trata de un ajuste de cuentas", afirmó.
Souza, un expolicía y exparlamentario del Estado de Amazonas, fue acusado de organizar asesinatos para tener la primicia y emitirlo en televisión, ya que resultaba mucha coincidencia que sus cámaras siempre fueran las primeras, por lo que se registró su domicilio en abril del 2009.
En su casa, la Policía encontró armamento y grandes cantidades de dinero en efectivo.
Su situación se agravó cuando un exmilitar confesó haber matado por encargo del conductor.
Debido a su cargo como legislador, tuvo que esperarse a que la Comisión de Ética de la Asamblea Legislativa levante su inmunidad y la justicia ordinaria pueda procesarle como autor intelectual de, al menos, seis homicidios.
Vínculos con el narcotráfico
"Souza y su hijo fabricaban crímenes para generar noticias y emitirlas en su programa. Y, de paso, ejecutar a rivales en el narcotráfico", expresó Thomas Augusto Vasconcelos, jefe por aquel entonces (2009) de la Unidad de Investigación de la Policía de Amazonas.
En esa línea, según se lee en El País, Souza y su hijo Rafael, quien tendría 26 años, mantenían vínculos con el narcotráfico. Este último, encarcelado, recibía información sobre la cocaína desembarcada en Manaos y procedía a la selección de los sicarios y al asesinato del destinatario, de acuerdo con la indagación.
Él robaba la droga y su padre, la audiencia. Mientras las ganancias eran repartidas a medias.
El presentador no llegó a cumplir condena. Se le retiró el acta parlamentaria y, poco tiempo después, su salud empezó a empeorar hasta que, tras varios meses ingresado en un hospital, falleció de un paro cardíaco.
