La conmovedora historia del hombre que nació sin mandíbula: “Mi sueño es convertirme en DJ algún día”
Williams asegura que “hay una razón por la que Dios me hizo así”, pues lo ayudó a superar los momentos difíciles. “Me dio esta carga porque sabía que podía llevarla”. Sin embargo, también dice que el amor le salvó la vida.
Joseph Williams, un estadounidense de 41 años, cuenta que ha sufrido bullying toda su vida por haber nacido sin mandíbula. Por otro lado, también afirma haber sido rescatado por el amor después de sobrevivir décadas sintiéndose “inútil”.
Ahora, quiere recordarles a otros que podrían estar luchando con desafíos que ellos también merecen más de la vida.
El hombre de Chicago nació con el raro trastorno congénito del síndrome otofacial, que es causado por un gen mutado, y lo dejó incapaz de hablar o comer con la boca. En cambio, usa el lenguaje de señas y un tubo para alimentarse.
“No puedo comer, hablar o incluso respirar correctamente”, dijo Williams. Foto: Caters
Con la esperanza de ayudar a otros, ahora habla abiertamente sobre cómo la gente solía huir de él o tratarlo de manera diferente. A veces quería esconderse y llorar, e incluso pensó en suicidarse, pero se esforzó para mantener el ánimo.
“Las citas también fueron difíciles para mí, porque tenía muy baja autoestima y me sentía inútil; pero cuando comencé a creer en mí mismo y me di cuenta de que merecía más, terminé encontrando a mi esposa”, narró.
Williams, que trabaja como soldador, había asumido durante mucho tiempo que viviría el resto de sus días como un hombre soltero, hasta que conoció a su alma gemela, Vania, de 39 años, en 2019.
“Éramos amigos al principio, pero eventualmente comenzamos a salir y nos enamoramos”, le confesó a la agencia de noticias Caters. “Nos casamos en 2020. Estoy seguro de que la gente nunca hubiera esperado que me casara. Para ser honesto, tampoco pensé que lo haría”.
PUEDES VER: Joe Biden advierte que la viruela del mono “es algo que debería preocupar a todo el mundo”
Williams conoció a su esposa Vania en 2019 y se casaron en 2020. Foto: Caters
Mencionó que “hay una razón por la que Dios me hizo así”, pues lo ayudó a superar los momentos difíciles. “Me dio esta carga porque sabía que podía llevarla”.
“Entiendo que soy diferente y que algunas personas pensarán que soy feo y no me aceptarán, pero sigo siendo una persona que tiene corazón, sentimientos y cerebro”, continuó. “Debería ser tratado con respeto, como cualquier otra persona”.
En lugar de mirar y señalar, dijo que quiere que las personas le hagan preguntas.
“La gente deja de hacer lo que está haciendo para mirarme y se vuelve molesto. Incluso un tipo detuvo su auto, dio la vuelta y pasó solo para mirarme”, afirma Williams. “Solo desearía que la gente me hablara y me hiciera preguntas en lugar de mirarme como un ciervo a la luz de los faros”.
PUEDES VER: Rusia publica lista de 963 estadounidenses a los que prohíbe el ingreso e incluye a Joe Biden
Al crecer, se recordó a sí mismo que nació así por una razón. Foto: Caters
Recuerda que, mientras crecía, todos querían protegerlo del mundo, y le decían que “no podía hacer esto y aquello, pero no quería que mi condición me detuviera y no quería ser limitado. .”
Williams aprendió a comunicarse a través del lenguaje de señas, gestos, su teléfono y escribiendo notas, mientras usaba un tubo especial en su estómago para comer.
“No puedo comer, hablar o incluso respirar correctamente”, aseguró. “Tengo un tubo en el estómago, en el que puedo colocar comida licuada, pero esto significa que nunca he probado comida”.
Cuando nació, no tener mandíbula “fue un shock” para su madre biológica. Con solo unos días de nacido, lo llevaron a Chicago para múltiples cirugías maxilofaciales.
PUEDES VER: EE. UU. y Corea del Sur intentarían ayudar a Corea del Norte en su lucha contra la COVID-19
Williams pasó toda su vida sin mandíbula y sufrió acoso. Foto: Caters
“Tuve un injerto de hueso y piel cuando intentaron construirme una mandíbula, pero a medida que crecía, mi cuerpo lo rechazó y no tuvo éxito”, dijo Williams. “Y también me dieron en adopción, lo que me llevó a conocer a mi familia adoptiva”.
“Crecer fue duro y nacer así me ha causado muchos problemas, pero he tratado de que no me afecte”, continuó.
Hoy, Williams promete que su condición física no le impedirá vivir su vida al máximo con Vania, y sus planes incluyen una pasión por tocar la batería y compartir música.
“Mi sueño es convertirme en DJ algún día. A veces puedo tener problemas para comunicarme, pero la música es una forma de expresarme”, manifiesta. “Nacer sin mandíbula me ha dado una perspectiva diferente de la vida y me ha convertido en quien soy hoy”.
Si usted, algún familiar o conocido suyo está atravesando por un momento difícil, siente que nada tiene sentido o no le encuentra salida a la situación por la que atraviesa, llame gratis en Perú al 0800-4-1212 (La voz amiga), 105 (PNP), 116 (Bomberos) o hable con alguien de confianza. Si está en otro país, ingrese aquí (https://www.telefonodelaesperanza.org/)