Rusia y Ucrania se acusan de nazismo
Conflicto. En la víspera del aniversario del fin de la Segunda Guerra Mundial, tanto Putin como Zelenski se lanzaron duras acusaciones. “Varias décadas después, la oscuridad retornó a Ucrania”, aseveró el presidente ucraniano.
Ucrania y Rusia se han acusado mutuamente de nazis en vísperas del aniversario del fin de la Segunda Guerra Mundial, entre temores de que el presidente ruso, Vladímir Putin, declare formalmente la guerra a Kiev durante el desfile militar del lunes en la Plaza Roja y provoque una escalada mayor del conflicto.
“Varias décadas después de la Segunda Guerra Mundial la oscuridad retornó a Ucrania. En otra forma, bajo otros lemas, pero bajo el mismo objetivo. En Ucrania han hecho una sangrienta reconstrucción del nazismo”, denunció ayer el presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, en un mensaje difundido en su cuenta de Telegram.
“Imitación fanática del nazismo”
El mandatario ucraniano acusó al Kremlin de “imitar fanáticamente” al régimen nazi un día antes de que Moscú celebre por todo lo alto el 77 aniversario de la victoria de la Unión Soviética sobre la Alemania de Hitler.
Todo ello, en medio de temores de que Putin aproveche esta ocasión para dejar a un lado la retórica de “operación militar especial” con que Moscú denomina actualmente la contienda en Ucrania, y declare abiertamente la guerra, lo cual cambiaría de modo radical la situación en el frente de batalla.
Algo que han alertado durante los últimos días las autoridades ucranianas y medios occidentales, al señalar que este paso podría incrementar el apoyo de los rusos a Putin y permitiría declarar una movilización general para caer con más fuerza sobre Ucrania.
Zelenski denunció que Rusia ha copiado “las ideas, acciones, palabras y símbolos” nazis y que repite en su país los delitos de Hitler en un intento de superarlo para “establecer un nuevo récord de xenofobia, odio, racismo y víctimas”.
Putin responde con la misma moneda
Una acusación que retomó Putin, pero en dirección de Ucrania, en un mensaje a los líderes y pueblos de países exsoviéticos, entre los cuales se dirigió al pueblo ucraniano, al alertar sobre “la inadmisibilidad de la revancha de los herederos ideológicos de quienes fueron vencidos en la Gran Guerra Patria”.
“Nuestro deber común es evitar el renacimiento del nazismo, que trajo tanto sufrimiento a la gente de diversos países. Es necesario conservar y transmitir (...) la verdad sobre los sucesos de la guerra, los valores espirituales comunes y las tradiciones de amistad y hermandad”, afirmó el mandatario, citado por el Kremlin.
Vladimir Putin envió una carta dirigida a los gobernantes de exrepúblicas soviéticas la mañana de hoy, domingo 8 de mayo. Foto: EFE
Y es que el objetivo declarado del presidente ruso en Ucrania, además de apoyar a las fuerzas prorrusas de las repúblicas de Lugansk y Donetsk y evitar que Ucrania se sume a la OTAN, es la “desmilitarización y desnazificación” de este país.
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Para Putin, el nazismo se encarna en Ucrania en las fuerzas ultranacionalistas que han ganado espacio en el Ejército ucraniano y que cuenta entre sus máximos exponentes con el batallón Azov, que ha destacado en el actual conflicto por la encarnizada resistencia con la que ha encarado las tropas rusas.
El presidente ruso se dirigió a los líderes de las repúblicas prorrusas de Donetsk y Lugansk, al destacar que en estos momentos sus militares, “al igual que sus abuelos, luchan hombro a hombro para liberar su tierra de la inmundicia nazi” y expresó su seguridad que, al igual que en 1945, “la victoria estará de nuestro lado”.
Especulación
Duda. Además de las expectativas sobre la posible declaración de guerra, desmentidas categóricamente por el Kremlin, se espera que Putin presente a los rusos una gran victoria en esta contienda, y se ha especulado que podría tratarse de la toma de la acería de Azovstal.
Meta. El objetivo sería, según Kiev, arrasar con los defensores de la acería y organizar un desfile en Mariúpol.