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El doctor que robó datos de EE. UU. para los servicios de inteligencia chinos

Así operaba Jun Wei Yeo, reclutado por agentes chinos en 2015, quien se declaró culpable de ser agente extranjero ilegal. Enfrenta hasta diez años de prisión.

Foto: Difusión.
Foto: Difusión.

El singapurense Jun Wei Yeo se declaró culpable en un tribunal de Washington de usar su empresa consultora en Estados Unidos para usurpar información que entregaba a los servicios de inteligencia de China, según informó este viernes 24 de julio el Departamento de Justicia.

Jun Wei Yeo, también conocido como Dickson Yeo, reconoció que operaba ilegalmente como agente extranjero y ahora enfrenta hasta diez años de prisión.

Según su admisión de culpabilidad, este doctor en políticas públicas fue reclutado en 2015 por agentes chinos inicialmente para proporcionar información sobre países de Asia, pero luego se le pidió que se concentrara en Estados Unidos.

En 2018, Jun Wei Yeo creó una empresa consultora falsa para recuperar currículums e información sobre militares u oficiales estadounidenses que trabajan en áreas sensibles, que luego enviaba a Pekín.

Contrataba a gente a la que "les pagaba para que escribieran informes diciéndoles que estaban destinados a clientes en Asia, pero sin revelar que eran enviados al gobierno chino", se lee en el documento.

Su perfil en el sitio profesional LinkedIn lo presenta como un “especialista en riesgo político que construye puentes entre Norteamérica, Pekín, Tokio y el Sudeste Asiático”.

La sentencia de Jun Wei Yeo se fijará en una audiencia el 9 de octubre próximo.

El juicio ocurre en un contexto de extrema tensión entre China y Estados Unidos, que en los últimos días ha arreciado sus acusaciones de espionaje contra Pekín, llegando incluso a ordenar el cierre del consulado chino en Houston bajo sospechas de ser un “epicentro” de espías del régimen comunista.

“El gobierno chino está utilizando la duplicidad en diversas formas para obtener informaciones sensibles de estadounidenses crédulos. Jun Wei Yeo fue una pieza central de uno de estos engaños”, dijo en un comunicado John Demers, encargado de seguridad nacional en el Departamento de Justicia estadounidense.