¿Qué es el enanismo, el trastorno que afectó el crecimiento de Quaden Baileys?
El llanto de Quaden Baileys mientras decía que quería suicidarse conmovió al mundo. ¿De qué se trata exactamente la enfermedad que padece?
Desde Australia, la historia de Quaden Baileys retumbó redes sociales por el bullying del que es víctima día a día: su baja estatura producto de la acondroplasia o enanismo, como también es conocida, es motivo de burla para sus compañeros.
Hace poco no pudo más con su tristeza y fue grabado por su madre mientras lloraba desconsoladamente y decía que no quería seguir viviendo.
La estremecedora escena no tardó en convertirse en viral en redes sociales mientras los mensajes de apoyo al menor de nueve años no paraban de llegar. Celebridades y hasta su equipo de rugby favorito, el cual lo invitó a un partido, se sumaron a la cruzada.
El enanismo que padece Quaden Baileys no solo cambia el ritmo de crecimiento de las personas, sino que también provoca otro tipo de consecuencias, tales como la hidrocefalia.
La persona que la padece, según un informe de la Clínica Mayo de Estados Unidos, llega a tener una estatura adulta máxima de 4 pies y 10 pulgadas (147 centímetros).
¿Qué es la acondroplasia?
Es un trastorno del crecimiento de los huesos que genera el tipo más común de enanismo, genética y autosómica, lo que quiere decir que es generada por un gen anormal heredado por uno de los padres.
Si uno de ellos padece la enfermedad, las probabilidades de que su hijo también la tenga es del 50%. Si los dos lo padecen, aumenta al 75%.
Sin embargo, la mayoría de casos proviene de una nueva mutación, es decir cuando ninguno de los padres tiene la afección, según el Stanford Children’s Health.
Los síntomas visibles son los brazos y piernas cortas y cabeza de tamaño acorde a la edad.
Su detección se puede dar antes del nacimiento mediante una ecografía fetal o pruebas de ADN o después a través de un examen físico.
Actualmente no existe un tratamiento para cambiar la afección, pero sí algunos que pueden ayudar a palear los problemas que deriva. Estos son cirugías para tratar la joroba, poder alagar las piernas o intentar que el paciente las incline sin dificultad.
Las posibles complicaciones son la hidrocefalia, problemas de postura, obesidad, infecciones de oído y apnea.
Existen dos tipos de enanismo: el desproporcionado y el proporcionado. En el primero algunas partes del cuerpo son pequeñas y otras de tamaño promedio, mientras que en el segundo todos, menos la cabeza, son reducidos proporcionalmente.