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Incendio en Australia atrapa a más de 4000 personas en playa del sureste [VIDEO]

El siniestro que ha arrasado con cinco millones de hectáreas es el peor incendio que se ha registrado en décadas.

Último día del 2019 y miles de personas en Australia atraviesan un trágico momento al encontrarse obligados a refugiarse en playas del sudeste del país, a causa de los incendios forestales que asolan la región.

El comisionado del Servicio de Bomberos Rurales de Nueva Gales del Sur, Shane Fitzsimmons, ha asegurado este martes que es la peor temporada de incendios que ha registrado este Estado, donde hay 120 incendios, 68 fuera de control y 3.000 bomberos luchando contra las llamas en la región.

Alrededor de 4000 mil personas entre habitantes y turistas, quedaron atrapados en las playas de la ciudad de Macoota, un pequeño municipio turístico. Algunos decidieron escapar hacia el litoral a bordo de sus barcos y huir de uno de los peores incendios que han ocurrido en décadas.

Este martes se han registrado dos nuevos muertos y al menos cinco personas desaparecidas en los estados de Nueva Galea del Sur y Victoria. Además, decenas de propiedades han sido destruidas y muchos animales han muerto por la gran magnitud del fuego que ha arrasado con cinco millones de hectáreas.

"Hoy es un día horrible para Nueva Gales del Sur en lo que se refiere a los incendios. Tras la trágica muerte anoche de un bombero voluntario, se ha confirmado que hay dos muertos en Cobargo, la policía lo ha confirmado, y una tercera está desaparecida", ha dicho en una rueda de prensa la jefa del Gobierno de ese Estado, Gladys Berijiklian.

Según los expertos, las temporadas de incendios en Australia que empiezan a principios de diciembre y duran hasta marzo, serán cada vez más extensas y tóxicas debido al cambio climático. El 17 y 18 de este diciembre, el país registró las dos jornadas más calurosas en toda la historia con temperaturas medias máximas de 40,9 y 41, 9, respectivamente.

“Tenemos tres equipos de intervención en Mallacoota que se encargarán de las 4.000 personas en la playa”, explicó el comisario Andrew Crisp, quien dijo estar “muy preocupado por este grupo que se encuentra aislado”.