Juan Vera Carrizal: ¿Quién es el exdiputado que habría planeado ataque con ácido a saxofonista?
El exdiputado Juan Vera ha sido señalado por la familia de la joven saxofonista como el autor intelectual del ataque.
El atentado contra María Elena Ríos Ortiz ha conmocionado a todo México. Y, desde el ataque en setiembre, hay un nombre que no deja de ser señalado por la familia de la víctima como el presunto autor intelectual. Se trata del exdiputado Juan Vera Carrizal, quien admitió conocer a la joven, pero negó tales acusaciones.
“María Elena Ríos trabajó conmigo y tenemos una amistad, pero eso no implica nada. Que la Fiscalía investigue y que capturen a la persona que hizo el atroz hecho”, fue parte del mensaje que el hombre de 56 años dirigió a los medios de comunicación.
En relación a su vida personal, trascendió que es el padre de tres hijos y que actualmente se encuentra casado. Además, estudió una licenciatura de español en la Escuela Normal Superior de México, carrera que no ejerció por dedicarse a la administración de sus empresas ubicadas en el estado de Oaxaca.
El expolítico se ha desempeñado como Presidente Municipal de la ciudad de Silacayoapan y Presidente de la Unión de Gasolineras del Estado de Oaxaca. Posteriormente fue diputado durante el período del 2016 al 2018 por el Partido Verde Ecologista de México (PVEM), aunque finalmente se integró al Partido Revolucionario Institucional (PRI).
¿Cuáles son las acusaciones la familia de María Elena Ortiz?
La hermana de María Elena Ortiz, Silvia, ha apuntado al exdiputado como el culpable de la agresión a su hermana. De acuerdo a la versión de la joven, ellos mantuvieron una relación sentimental que llegó a su fin por “las agresiones y machismo” del hombre.
“La hostigaba, le decía que de músico y de muerta de hambre no iba a salir; que regresara con él y que la iba a tratar como princesa porque los músicos aparte de drogadictos y borrachos no tienen en qué caerse muertos”, fueron las duras palabras de la hermana al portal Infobae.
Por lo pronto, se sabe que la víctima ya ha sido trasladada al Instituto Nacional de Rehabilitación, donde es sometida a intervenciones quirúrgicas de forma regular. Hasta el momento la familia ha gastado más de 200 mil pesos entre medicamentos y atención médica.
“Ella me dice que le truncaron su sueño y que no sabe para qué vive, que mejor la hubieran matado a dejarla en el estado en que está ahora”, confesó Silvia sobre la salud de su hermana a una radio mexicana.