Mujer agonizó durante cuatro días en la Maternidad 25 de mayo de Argentina, adonde llegó grave e inconsciente tras practicarse un aborto clandestino. ,Decidió interrumpir el embarazo, puso perejil en su vagina y una infección severa la condujo a la muerte. Una mujer de 30 años falleció tras realizarse un aborto clandestino, en San Fernando del Valle de Catamarca (Argentina), según informó la organización Campaña por el Aborto Legal, Seguro y Gratuito informó, a través de Facebook. Paulina (nombre ficticio para proteger su identidad) agonizó durante cuatro días en la Maternidad 25 de mayo de la ciudad, adonde llegó grave e inconsciente tras varias horas de viaje por carretera. PUEDES VER “Estoy hasta la madre del machismo”: legisladora de México defiende aborto legal [VIDEO] La organización asegura que, para evitar comentarios y proteger a la víctima, sus familiares han preferido cambiar la versión de su muerte. Para ellos no murió por una septicemia generalizada, sino debido a una peritonitis. Según la misiva de Facebook, ni la policía de la provincia ni los médicos que atendieron a la víctima radicaron denuncias, así que al cuerpo no se le hizo ninguna autopsia y tras el velorio, Paulina fue sepultada. El estigma del aborto y las consecuencias de su clandestinidad se ven cristalizadas en estos casos, en los cuales ninguna mujer que vive en pueblos o ciudades pequeñas (infiernos grandes) quiere ni se anima a contar que se realizó dicha práctica por la presión y la culpa social que recae sobre ellas. “El Estado obliga a las mujeres y personas con capacidad de gestar a exponerse a métodos inseguros para llevar adelante su decisión. No queremos más muertes por abortos clandestinos. Necesitamos con urgencia que se garantice el libre acceso al sistema público de salud ya que este es un derecho humano fundamental”, se lee en el comunicado de Facebook de la organización.