El nuevo gobernador de Río de Janeiro, Wilson Witzel es un fiel seguidor del ultraderechista Jair Bolsonaro, y como él, defiende la "mano" dura y la violencia policial para combatir la delincuencia.,El exjuez federal Wilson Witzel no oculta su admiración por las ideas más radicales del presidente electo de Brasil, Jair Bolsonaro. Esta vez, el nuevo gobernador de Río de Janeiro anunció una propuesta para combatir la delincuencia: la utilización de francotiradores dispuestos a matar a los sospechosos que porten fusiles en las favelas. ¿Cuáles fueron sus polémicas declaraciones? Desde las filas del Partido Social Cristiano, Wilson Witzel llegó al poder de la segunda ciudad más grande de Brasil con el 60% de los votos. Un lugar donde la delincuencia impera y donde, en el 2017, se registraron 6.749 muertes según el Foro de Seguridad Pública. En ese clima sumamente hostil, para el nuevo gobernador lo ideal es combatir la violencia con más violencia. PUEDES VER: El juez Sergio Moro en una cruzada ¿contra la corrupción o por el poder? Las declaraciones del nuevo gobernador de Río de Janeiro Así, Wilson Witzel remarcó su apoyo a las ejecuciones extrajudiciales: Lo correcto es matar al delincuente. Y la policía va a hacer lo correcto. Apuntar a la cabeza y ¡fuego!”, señaló en declaraciones al diario Estadão. Anteriormente, justificó esta postura violentista argumentando que no sirve de nada pedirle a los malhechores que se rindan, porque de todas maneras ellos arremeterán contra los agentes del orden. Una idea muy popular entre los sectores más conservadores: “A un malhechor con un fusil lo frena otro fusil. No sirve de nada pedirle que lo deje en el suelo, porque va a disparar. El policía que fuera cuestionado, le va a defender la fiscalía”, anunció la semana pasada en un encuentro con las fuerzas de seguridad brasileñas. PUEDES VER: El ascenso de Jair Bolsonaro: del ejército a la presidencia de Brasil Al ser consultado por los episodios en los que las autoridades tirotearon a inocentes con objetos que fueron confundidos con armas, el gobernador electo manifestó que "normalmente un francotirador no dispara a quien está con paraguas y mucho menos a quien está con una máquina de taladrar". "En esos casos eran policías que no estaban preparados para ese tipo de misión", pero "serán entrenados" para ello, aseguró y añadió que ya solicitó un levantamiento a distintos cuerpos para saber qué agentes ya se hallan "calificados". "Hoy, en Ciudad de Dios -una favela en la zona oeste de Río-, un helicóptero grabó a cinco elementos armados con fusiles. Allí, si uno tiene una operación en que nuestros policías están autorizados para abatir, todos ellos serán eliminados", completó. Apoyo del sector ultraderechista En el marco de proliferación de discursos de odio, las declaraciones de Witzel fueron respaldadas por el próximo ministro de Defensa de Brasil, Augusto Heleno, quien defendió el endurecimiento de las medidas contra el crimen amparándose en la ola de violencia que azota Brasil y, sobre todo, a la ciudad de Río de Janeiro. "Es una reacción necesaria a la exhibición ostentosa de armas de guerra en las manos, muchas veces, de jóvenes" en Río de Janeiro, afirmó el general retirado Augusto Heleno. Violación a los Derechos Humanos La organización Aministía Internacional advierte que autorizar a los policías a actuar de forma ilegal, violenta y vulnerando los Derechos Humanos solo desencadenará un incremento de violencia que pondrá en riesgo la vida de miles de personas, incluyendo la de los agentes de seguridad.