Problemas como el exceso de turistas y la reducción de población local pone en peligro a famosa ciudad italiana.,Diversos puntos de vista ha generado la decisión del alcalde de Venecia de colocar medidas de restricción a dos puertas de la ciudad debido a los serios problemas de sostenibilidad que presenta la ciudad italiana. El día de hoy en la mañana, un grupo de manifestantes se hizo presente frente a un grupo de tornos para hacer conocer su disconformidad con la decisión de colocar controles para las principales entradas de la famosa ciudad italiana pues la convertiría en un parque temático. PUEDES VER Machu Picchu y la Amazonía en lista de destinos imperdibles Esta aglomeración de aproximadamente 30 personas se identificaron como integrantes del grupo de izquierda radical Morion. "Los 'Check Point' son el símbolo de la decisión de idear nuestra ciudad como un espacio inhabilitado, solamente para uso turístico, sin aprovechar y resaltar su valor", indicó en un comunicado la organización, reporta El Diario de Navarra. No obstante, a pesar que se anunció el carácter pacífico de la medida, unos jóvenes lograron arrancar uno de los tornos de control, el cual fue repuesto horas más tarde, anunció en Facebook el alcalde de la ciudad, Luigi Brugnaro. Brugnaro ordenó días antes colocar cuatro controles de acceso al lugar turístico, de los cuales dos se ubican en la plaza de Roma y otros dos frente a la Iglesia de los Descalzos. “Es la primera vez que se intentan regular los flujos en Venecia. Claramente, cometeremos muchos errores y tendremos muchas críticas, pero por ahora está funcionando todo perfectamente”, explicó el burgomaestre italiano, según indica El País. La medida de Brugnaro parece responder a las serias amenazas que rondan a la famosa ciudad de los canales. Según recoge El País,reportes e investigaciones detallan que las vistas turísticas aumentan en demasía, solo el año pasado se reportaron más de 24 millones, de los cuales dos millones y medio lo hizo por medio de cruceros, ya prohibidos por constituir un serio daño al paisaje de la ciudad, considerada patrimonio de la humanidad. Asimismo, su población, que hoy se cuenta en poco más de 55 mil personas, ha caído en dos tercios desde la mitad del siglo pasado, con una tasa de 1 000 residentes menos por cada año.