Economía

Emolienteros evalúan incrementar precio de la tradicional bebida y demandan apoyo del Gobierno

¿A cuánto subiría? Debido a la inflación, gremio de emolienteros que agrupa a más de 60.000 trabajadores analiza subir el precio de esta bebida que forma parte del desayuno y el lonche.

Federación de Emolienteros señaló que precio de insumos se han elevado hasta en 100%, Foto: La República
Federación de Emolienteros señaló que precio de insumos se han elevado hasta en 100%, Foto: La República

A causa del alza de precios de la canasta básica familiar, los emolienteros evalúan incrementar el precio del vaso de esta tradicional bebida a S/2,00. Así lo confirmó Edgar Sáenz, presidente de la Federación Nacional de Emolienteros y Afines del Perú (Fentep).

En entrevista con RPP, el dirigente argumentó que los precios de todos los insumos, que forman parte de la preparación del emoliente, se han elevado "de forma abusiva" hasta en 100% y, pese a ello, los trabajadores han mantenido el precio de S/1,50. "Estamos evaluando incrementarlo a S/2,00. Vemos que el sueldo mínimo no sube y hay tanta desocupación", expresó.

A su vez, manifestó que el Gobierno no toma en cuenta que los emolienteros también son parte del motor de la economía del país. En el Perú son más de 60.000 trabajadores, de los cuales el 75% son mujeres.

Emoliente: insumos que más subieron de precio

Al respecto, el representante indicó que, después de la pandemia de la COVID-19, entre los productos que más subieron de precio, está el aceite, cuyo galón de cinco litros pasó de costar S/24 a S/45. Similar situación se presentó con el huevo que de S/4,80 el kilo ahora cuesta S/11, mientras que un saco de azúcar que oscilaba entre S/75 y S/80 al por mayor ahora lo compran a S/180.

Emolienteros del Perú empiezan su rutina de trabajo a la 1 de la la madrugada. Foto: Andina

Emolienteros del Perú empiezan su rutina de trabajo a la 1 de la la madrugada. Foto: Andina

"Los emolienteros vendemos al mes 300.000 sacos de azúcar, casi 1.800.000 litros de aceite y 360 millones de tarros de leche. Todo ello lo utilizamos en la preparación de maca, quinua, soya, siete semillas, ponche de habas, avena", explicó.

Labor sacrificada

Por otro lado, el presidente de Fentep destacó el trabajo del emolientero que para muchos parece ser sencillo; sin embargo, la rutina laboral es muy sacrificada.

"Nos levantamos a la una de la madrugada para comenzar a preparar los alimentos que saldrán a la venta. Es un negocio que involucra también a la familia. Nuestros hijos nos dan la mano, uno prepara la linaza, otro, la soya, y otro prepara los sánguches o lava los utensilios”, resaltó.